Basado en la famosa pelicula de Alfred Hitchcock, Vemos a Scootaloo recuperandose de un accidente y observando desde su ventana a pinkie, quien viene comportandose extrañamente esos ultimos dias.
con actuaciones protagonicas de: , , y
capitulo 1
Spoiler:
Era un soleado día de verano y los potros de Ponyville venían de todas direcciones. Potros de todos tamaños, con alas, cuernos o sin ellos; todos igual de ruidosos y malcriados. Todos tenían el mismo motivo de dirigirse al centro de la plaza, ver a Scootaloo realizar su tan cacareada acrobacia.
-¿Realmente va a hacer esa locura? ¿Saltara desde esa altura? -Comento la potra pelirroja
-Lo sé, yo también creo que es una locura…pero tú sabes lo testaruda que se pone Scootaloo a veces. –Respondió la pequeña unicornio.
Con una energía sorprendente para unas pequeñas potras, las CMC habían construido dos rampas de madera para la proeza que la Pegaso naranja tenía en mente. Ella amaba la sensación de la adrenalina fluyendo por su cuerpo, especialmente si eso le representaba desafiar un reto mayor.
-¿De verdad piensas hacerlo? ¿No crees que es una mala idea?-Preguntaba nerviosa Sweetie B, preocupada por la seguridad de su amiga.
-¿Mala idea? Sweety ¿Acaso piensas que soy una gallina? No, no daré un paso atrás, llevo mucho tiempo preparando esta acrobacia. No soy una yegua que viva temiendo a sus acciones.
-No, pero…sería bueno que lo meditaras un poco y…- Sweetie enmudeció al ver el rostro molesto de Scootaloo.
-Ja, ¿Para acobardarme? No, no tengo tiempo.
Subió con su escúter hasta la parte superior de la rampa. Giro la cabeza, había muchos potros observándola desde abajo y se preguntó si eso era la vista que tenían los otros pegasos desde las alturas.
-Y ahora, potros y potrancas. –Apple Bloom se acomodó frente al público con un micrófono en los cascos.- ¡las Cutie Marks Crusaders se complacen en presentar a la espectacular Scootaloo y su acto de acrobacia extrema! ¡Por primera vez, una potrilla retara a la muerte y saltara de una rampa a otra, por encima de cinco carretones repletos de manzana!
Scootaloo se acicalo la crin, se acomodó el casco y reunió valor para realizar su acrobacia.
-Por el amor de Celestia ¡Que no le pase nada malo a mi amiga!- Musito Sweetie Belle.
-¡Los Pegasos nacimos para volar! -Grito desde las alturas e inmediatamente se lanzó por la rampa, buscando la mayor aceleración en la caída. Siempre soñó con surcar la inmensidad del cielo, ser una pequeña hoja arrastrada por el viento. Lo sentía en todo su cuerpo, la embriagante sensación de retar a la gravedad.
Solo este instante vale más que toda mi vida en conjunto. –Pensó la pequeña potra alada.
El siguiente suceso fue tan rápido, que nadie pudo reaccionar a tiempo. Fue un error mínimo, de fracción de segundos, imperceptible al ojo ecuestre. Lo que todos alcanzaron a ver, fue a Scootaloo cayendo de la rampa y estrellándose en uno de los carretones de manzana.
-¡Scoot, amiga! ¿Cómo te encuentras? –Apple Bloom corrió en dirección al accidente y le quito el casco. –Aléjense, ¿no ven que acaba de sufrir un accidente?
-Dime ¿cuantos dedos vez?- pregunto Sweetie para cerciorarse que Scoot se encontrara bien.
-Sweetie Belle, ¡Nosotros no tenemos dedos!-comento Apple Bloom.
-oh, es cierto. Tonta de mí.
-Haber, ¿Qué es todo este alboroto? –los potros que se encontraban al lado de Scootaloo se desplazaron para permitirle el paso a una unicornio morada. -¡Por el amor de Celestia! ¿Qué le paso a Scootaloo?
-Auch, ¿Qué sucedió? –Scootaloo giro la cabeza en dirección a los curiosos.- ¿Qué están mirando? ¡Soy o me parezco! Regresen a sus casitas, nenitas, aquí no hay nada que ver.
-Scootaloo, ¿Cómo te sientes? ¿No te rompiste nada?
-Vamos Twi, como si una simple caída me fuera a afectar tanto. –Scootaloo sintió un terrible dolor cuando Twilight toco su pata izquierda.
-¿de verdad? Esta pata no se ve en muy buenas condiciones. Vamos, te llevare a la biblioteca, ahí podrás descansar un rato. –Twilight lanza un hechizo de levitación sobre Scootaloo, teniendo bastante cuidado con su pata lastimada.
-Woah, Twilight, ¡eres muy buena con los hechizos de levitación!
-Esto no es nada Sweetie Belle, una vez levite una osa menor. Con un poco de práctica tú también podrás realizar hechizos como este.
-¡De qué diablos están hablando, no soy una bebe para que me transporten de esta forma!- grito molesta Scoot.
Horas después, en la Biblioteca…
-¿Apple Bloom y Sweetie Belle ya se fueron?
-Me ayudaron a acomodarte en la cama. Por cierto, tus padres estarán fuera de la ciudad y me pidieron que te cuidara en su ausencia.
-¡Que padres tan atentos! ¡Se nota la preocupación hacia su pequeña hija! -contesto sarcásticamente la potranca. –Supongo que tienen mejores cosas que preocuparse de una pegaso que no puede volar.
Twilight noto cierta tristeza en los ojos de la potra al hablarle de sus padres e intento animarla.
-No es tan malo, sé que la pasaremos bien las dos. Con tus padres fuera y Spike acompañando a Rarity a Canterlot…tu sabes, horas de diversión entre chicas.
Scootaloo miro al techo de la biblioteca, sabía que tendría que quedarse en cama mientras se recuperaba de su accidente.
Twilight se acercó a Scootaloo. –No te preocupes, sé que nos divertiremos mucho. Ya verás como el tiempo pasara muy rápido.
-Y cuál es tu idea de diversión, ¿Un libro?
-Pues, veras…
-Olvídalo. –Tomo la cobija y se cubrió con esta. - La pegaso tomboy que sufre un accidente y descubre su pasión por los libros mientras se recupera.- Scootaloo esbozó una pequeña sonrisa, mientras recordaba algo curioso. –Creo que eso ya se vio en la temporada pasada o algo por el estilo.
-Bueno, si no te sientes con ganas de leer. –Los ojos de la unicornio brillaron con un misterioso resplandor, el resplandor de la determinación ardiendo intensamente. -Sé que encontrare algo que pueda interesarte.
Twilight abrío su armario y empezo a buscar entre las cajas, algo que le fuera útil.
-¿Una cuerda para saltar? ¡Qué recuerdos! Yo y Cadence pasábamos todas las mañanas…-Volteando a ver a Scootaloo y su pata. –Creo que no es buena idea… ¿Un balón de soccer? ¡Diablos, que cosas digo!
La Pegaso la miraba incredula hasta que se animo a preguntarle algo.
-A propósito Twilight, ¿Has visto últimamente a Rainbow Dash? Intente invitarla a ver mi última proeza, pero no estaba en casa.
-Un hula hula…uhmm, yo tampoco la he visto el día de hoy. Me parece que Cherrilee me comento que la vio entrar a Sugar Cube corner en la mañana…la libreta de Smarty.-Rascándose la cabeza.- ¿Dónde deje mi muñeca Smarty Pants?
-Entonces, tú tampoco sabes nada acerca de ella…temo que le haya ocurrido algo.-Comento la pegaso con una cara de tristeza.
-tranquila, sé que ella se encuentra bien. Tú conoces mejor que nadie a esa Pegaso. –la unicornio le dio un beso en la frente. – ¡Pero mira que horas son! ¡Fluttershy! Descansa, tengo que visitar a fluttershy. Ella me dijo que tiene una férula para tu pata.
La unicornio salío con bastante prisa de su casa, sin notar que alguien la observaba salir por la puerta.
Scotaloo cerró los ojos y acomodo la parte trasera de su cabeza sobre la almohada. –No debo preocuparme, Rainbow debe encontrarse en alguna intrépida misión o algo por el estilo. –susurro la pequeña potra, mientras cerraba sus ojos.
-Rainbow Dash? Me suena, ¿Acaso es el nombre de una buena amiga? Oh, por supuesto…todos en Ponyville son mis amigos.
Scoot volvió a abrir los ojos.
Scoot conocía esa voz, era la voz de la pony más alocada y extrovertida del pueblo. Pero había algo aterrador en esa voz, algo que le provocaba un calosfrío en la espalda.
-¿Pinkie? Tú. Pero…como.
-Silencio, necesitas recuperar tus fuerzas. –la pony rosa deslizo su casco izquierdo por su crin. - Entre por la puerta trasera de la biblioteca después que salió Twilight. –Puso un juego de llaves sobre la ventana de la habitación. –Imagínate lo que pensarían mis amigas si supieran que tengo copias de sus llaves.
Al colocarse Pinkie frente a la ventana, la potra noto algo distinto en la pony; se veía más desgarbada, su cabello lo llevaba lacio y unas marcadas ojeras surcaban la parte baja de sus ojos. Además, ¿Por qué no lucia tan alegre como en otros días?
-No esperaba encontrarte despierta, por eso evite hacer ruido, no quería asustarte Pequeña. – Sonrió siniestramente la peli rosa.
Scootaloo reflexiono por un segundo las palabras de Pinkie. ¿No resultaba más aterrador aparecer de pronto frente a la cama? ¿Y Si fuese un ladrón o un psicópata con motosierra en cascos en lugar de Pinkie? ¡Qué clase de mente enferma podia hacer esos comentarios! ¡Podría provocarle un trauma y años de terapia!- Bueno, eso tiene sentido. –Contesto fríamente.
-Te traje panquecillos, Deliciosos panquecillos recién horneados. Pruébalo, he agregado un ingrediente secreto que, creo, amaras. –Ella traia en sus cascos una caja, de donde saco un pastelillo y se lo dio a Scoot. Ella lo examino detenidamente.
- Se ven bastante…coloridos. ¿Cuál es el ingrediente secreto?
Pinkie pellizco la mejilla de la potra.-Eres muy lista, ¿Por qué no lo descubres por tu cuenta? –la potra observo a la yegua mientras retiraba su casco de su mejilla. Por un segundo le pareció verla sonreír siniestramente, pero podría ser su imaginación jugándole una broma. –Lo siento pequeña, tengo que retirarme antes que Twilight regrese. No vaya a molestarse por entrar sin su consentimiento.
Scootaloo observo como la yegua se retiraba, no, prácticamente se hundía en las sombras de la habitación para desaparecer en ellas.
-Oh, genial. ¡De seguro, esto me dejara más traumas para la próxima temporada!-vuelve a mirar el pastelillo. –Vaya, me recuerda a Rainbow.
En ese mismo instante, varias ideas se agolparon en su cabeza y un hormigueo invadió su cuerpo.
-No, ¡Ella no se atrevería, es su amiga! -Se quitó la sabana de encima y empezó a aletear afuera de la cama.-¡Si ella le hizo daño, si realmente lastimo a Rainbow!
Su cabeza estaba tan confundida, que fácilmente perdió el control de sus alas y se golpeó con el piso de la habitación.
-¡Mierda, mierda, mierda! –grito a todo pulmón mientras agarraba su pata trasera con sus dos patas delanteras. –No puedo rendirme, ¡tengo que desenmascarar a Pinkie a toda costa! O si no, o si no. –unas pequeñas lagrimas brotaron de los ojos de Scoot. -¿A quién engaño? Solo soy una tonta potra con sueños de grandeza, ni siquiera puedo volar aunque siempre lo he intentado… ¡ACEPTALO SCOOTALO, RAINBOW DASH ESTA MUERTA Y NADA PUEDES HACER PARA CAMBIARLO! Sob, estúpida, cobarde, inútil, sob, solo eres una vergüenza, sob, deberías dejar que te capture y cocine, sob, tu vida ¡TU NO VALES NADA!
Acerca su pata delantera derecha a su rostro y empieza a secarse las lágrimas.
-¿Qué puedo hacer? ¿Cómo demuestro que Pinkie está cocinando ponys? ¡Cómo!
La potranca golpeo, con su pata delantera derecha, una caja de cachivaches que Twilight dejo fuera de su armario y un objeto cilíndrico le golpeo la espalda,
-Esto es, ¡El telescopio de Twilight!-sus ojos se iluminaron de alegría. –Je, Jeje…JAJAJAJA.
-¿Realmente va a hacer esa locura? ¿Saltara desde esa altura? -Comento la potra pelirroja
-Lo sé, yo también creo que es una locura…pero tú sabes lo testaruda que se pone Scootaloo a veces. –Respondió la pequeña unicornio.
Con una energía sorprendente para unas pequeñas potras, las CMC habían construido dos rampas de madera para la proeza que la Pegaso naranja tenía en mente. Ella amaba la sensación de la adrenalina fluyendo por su cuerpo, especialmente si eso le representaba desafiar un reto mayor.
-¿De verdad piensas hacerlo? ¿No crees que es una mala idea?-Preguntaba nerviosa Sweetie B, preocupada por la seguridad de su amiga.
-¿Mala idea? Sweety ¿Acaso piensas que soy una gallina? No, no daré un paso atrás, llevo mucho tiempo preparando esta acrobacia. No soy una yegua que viva temiendo a sus acciones.
-No, pero…sería bueno que lo meditaras un poco y…- Sweetie enmudeció al ver el rostro molesto de Scootaloo.
-Ja, ¿Para acobardarme? No, no tengo tiempo.
Subió con su escúter hasta la parte superior de la rampa. Giro la cabeza, había muchos potros observándola desde abajo y se preguntó si eso era la vista que tenían los otros pegasos desde las alturas.
-Y ahora, potros y potrancas. –Apple Bloom se acomodó frente al público con un micrófono en los cascos.- ¡las Cutie Marks Crusaders se complacen en presentar a la espectacular Scootaloo y su acto de acrobacia extrema! ¡Por primera vez, una potrilla retara a la muerte y saltara de una rampa a otra, por encima de cinco carretones repletos de manzana!
Scootaloo se acicalo la crin, se acomodó el casco y reunió valor para realizar su acrobacia.
-Por el amor de Celestia ¡Que no le pase nada malo a mi amiga!- Musito Sweetie Belle.
-¡Los Pegasos nacimos para volar! -Grito desde las alturas e inmediatamente se lanzó por la rampa, buscando la mayor aceleración en la caída. Siempre soñó con surcar la inmensidad del cielo, ser una pequeña hoja arrastrada por el viento. Lo sentía en todo su cuerpo, la embriagante sensación de retar a la gravedad.
Solo este instante vale más que toda mi vida en conjunto. –Pensó la pequeña potra alada.
El siguiente suceso fue tan rápido, que nadie pudo reaccionar a tiempo. Fue un error mínimo, de fracción de segundos, imperceptible al ojo ecuestre. Lo que todos alcanzaron a ver, fue a Scootaloo cayendo de la rampa y estrellándose en uno de los carretones de manzana.
-¡Scoot, amiga! ¿Cómo te encuentras? –Apple Bloom corrió en dirección al accidente y le quito el casco. –Aléjense, ¿no ven que acaba de sufrir un accidente?
-Dime ¿cuantos dedos vez?- pregunto Sweetie para cerciorarse que Scoot se encontrara bien.
-Sweetie Belle, ¡Nosotros no tenemos dedos!-comento Apple Bloom.
-oh, es cierto. Tonta de mí.
-Haber, ¿Qué es todo este alboroto? –los potros que se encontraban al lado de Scootaloo se desplazaron para permitirle el paso a una unicornio morada. -¡Por el amor de Celestia! ¿Qué le paso a Scootaloo?
-Auch, ¿Qué sucedió? –Scootaloo giro la cabeza en dirección a los curiosos.- ¿Qué están mirando? ¡Soy o me parezco! Regresen a sus casitas, nenitas, aquí no hay nada que ver.
-Scootaloo, ¿Cómo te sientes? ¿No te rompiste nada?
-Vamos Twi, como si una simple caída me fuera a afectar tanto. –Scootaloo sintió un terrible dolor cuando Twilight toco su pata izquierda.
-¿de verdad? Esta pata no se ve en muy buenas condiciones. Vamos, te llevare a la biblioteca, ahí podrás descansar un rato. –Twilight lanza un hechizo de levitación sobre Scootaloo, teniendo bastante cuidado con su pata lastimada.
-Woah, Twilight, ¡eres muy buena con los hechizos de levitación!
-Esto no es nada Sweetie Belle, una vez levite una osa menor. Con un poco de práctica tú también podrás realizar hechizos como este.
-¡De qué diablos están hablando, no soy una bebe para que me transporten de esta forma!- grito molesta Scoot.
Horas después, en la Biblioteca…
-¿Apple Bloom y Sweetie Belle ya se fueron?
-Me ayudaron a acomodarte en la cama. Por cierto, tus padres estarán fuera de la ciudad y me pidieron que te cuidara en su ausencia.
-¡Que padres tan atentos! ¡Se nota la preocupación hacia su pequeña hija! -contesto sarcásticamente la potranca. –Supongo que tienen mejores cosas que preocuparse de una pegaso que no puede volar.
Twilight noto cierta tristeza en los ojos de la potra al hablarle de sus padres e intento animarla.
-No es tan malo, sé que la pasaremos bien las dos. Con tus padres fuera y Spike acompañando a Rarity a Canterlot…tu sabes, horas de diversión entre chicas.
Scootaloo miro al techo de la biblioteca, sabía que tendría que quedarse en cama mientras se recuperaba de su accidente.
Twilight se acercó a Scootaloo. –No te preocupes, sé que nos divertiremos mucho. Ya verás como el tiempo pasara muy rápido.
-Y cuál es tu idea de diversión, ¿Un libro?
-Pues, veras…
-Olvídalo. –Tomo la cobija y se cubrió con esta. - La pegaso tomboy que sufre un accidente y descubre su pasión por los libros mientras se recupera.- Scootaloo esbozó una pequeña sonrisa, mientras recordaba algo curioso. –Creo que eso ya se vio en la temporada pasada o algo por el estilo.
-Bueno, si no te sientes con ganas de leer. –Los ojos de la unicornio brillaron con un misterioso resplandor, el resplandor de la determinación ardiendo intensamente. -Sé que encontrare algo que pueda interesarte.
Twilight abrío su armario y empezo a buscar entre las cajas, algo que le fuera útil.
-¿Una cuerda para saltar? ¡Qué recuerdos! Yo y Cadence pasábamos todas las mañanas…-Volteando a ver a Scootaloo y su pata. –Creo que no es buena idea… ¿Un balón de soccer? ¡Diablos, que cosas digo!
La Pegaso la miraba incredula hasta que se animo a preguntarle algo.
-A propósito Twilight, ¿Has visto últimamente a Rainbow Dash? Intente invitarla a ver mi última proeza, pero no estaba en casa.
-Un hula hula…uhmm, yo tampoco la he visto el día de hoy. Me parece que Cherrilee me comento que la vio entrar a Sugar Cube corner en la mañana…la libreta de Smarty.-Rascándose la cabeza.- ¿Dónde deje mi muñeca Smarty Pants?
-Entonces, tú tampoco sabes nada acerca de ella…temo que le haya ocurrido algo.-Comento la pegaso con una cara de tristeza.
-tranquila, sé que ella se encuentra bien. Tú conoces mejor que nadie a esa Pegaso. –la unicornio le dio un beso en la frente. – ¡Pero mira que horas son! ¡Fluttershy! Descansa, tengo que visitar a fluttershy. Ella me dijo que tiene una férula para tu pata.
La unicornio salío con bastante prisa de su casa, sin notar que alguien la observaba salir por la puerta.
Scotaloo cerró los ojos y acomodo la parte trasera de su cabeza sobre la almohada. –No debo preocuparme, Rainbow debe encontrarse en alguna intrépida misión o algo por el estilo. –susurro la pequeña potra, mientras cerraba sus ojos.
-Rainbow Dash? Me suena, ¿Acaso es el nombre de una buena amiga? Oh, por supuesto…todos en Ponyville son mis amigos.
Scoot volvió a abrir los ojos.
Scoot conocía esa voz, era la voz de la pony más alocada y extrovertida del pueblo. Pero había algo aterrador en esa voz, algo que le provocaba un calosfrío en la espalda.
-¿Pinkie? Tú. Pero…como.
-Silencio, necesitas recuperar tus fuerzas. –la pony rosa deslizo su casco izquierdo por su crin. - Entre por la puerta trasera de la biblioteca después que salió Twilight. –Puso un juego de llaves sobre la ventana de la habitación. –Imagínate lo que pensarían mis amigas si supieran que tengo copias de sus llaves.
Al colocarse Pinkie frente a la ventana, la potra noto algo distinto en la pony; se veía más desgarbada, su cabello lo llevaba lacio y unas marcadas ojeras surcaban la parte baja de sus ojos. Además, ¿Por qué no lucia tan alegre como en otros días?
-No esperaba encontrarte despierta, por eso evite hacer ruido, no quería asustarte Pequeña. – Sonrió siniestramente la peli rosa.
Scootaloo reflexiono por un segundo las palabras de Pinkie. ¿No resultaba más aterrador aparecer de pronto frente a la cama? ¿Y Si fuese un ladrón o un psicópata con motosierra en cascos en lugar de Pinkie? ¡Qué clase de mente enferma podia hacer esos comentarios! ¡Podría provocarle un trauma y años de terapia!- Bueno, eso tiene sentido. –Contesto fríamente.
-Te traje panquecillos, Deliciosos panquecillos recién horneados. Pruébalo, he agregado un ingrediente secreto que, creo, amaras. –Ella traia en sus cascos una caja, de donde saco un pastelillo y se lo dio a Scoot. Ella lo examino detenidamente.
- Se ven bastante…coloridos. ¿Cuál es el ingrediente secreto?
Pinkie pellizco la mejilla de la potra.-Eres muy lista, ¿Por qué no lo descubres por tu cuenta? –la potra observo a la yegua mientras retiraba su casco de su mejilla. Por un segundo le pareció verla sonreír siniestramente, pero podría ser su imaginación jugándole una broma. –Lo siento pequeña, tengo que retirarme antes que Twilight regrese. No vaya a molestarse por entrar sin su consentimiento.
Scootaloo observo como la yegua se retiraba, no, prácticamente se hundía en las sombras de la habitación para desaparecer en ellas.
-Oh, genial. ¡De seguro, esto me dejara más traumas para la próxima temporada!-vuelve a mirar el pastelillo. –Vaya, me recuerda a Rainbow.
En ese mismo instante, varias ideas se agolparon en su cabeza y un hormigueo invadió su cuerpo.
-No, ¡Ella no se atrevería, es su amiga! -Se quitó la sabana de encima y empezó a aletear afuera de la cama.-¡Si ella le hizo daño, si realmente lastimo a Rainbow!
Su cabeza estaba tan confundida, que fácilmente perdió el control de sus alas y se golpeó con el piso de la habitación.
-¡Mierda, mierda, mierda! –grito a todo pulmón mientras agarraba su pata trasera con sus dos patas delanteras. –No puedo rendirme, ¡tengo que desenmascarar a Pinkie a toda costa! O si no, o si no. –unas pequeñas lagrimas brotaron de los ojos de Scoot. -¿A quién engaño? Solo soy una tonta potra con sueños de grandeza, ni siquiera puedo volar aunque siempre lo he intentado… ¡ACEPTALO SCOOTALO, RAINBOW DASH ESTA MUERTA Y NADA PUEDES HACER PARA CAMBIARLO! Sob, estúpida, cobarde, inútil, sob, solo eres una vergüenza, sob, deberías dejar que te capture y cocine, sob, tu vida ¡TU NO VALES NADA!
Acerca su pata delantera derecha a su rostro y empieza a secarse las lágrimas.
-¿Qué puedo hacer? ¿Cómo demuestro que Pinkie está cocinando ponys? ¡Cómo!
La potranca golpeo, con su pata delantera derecha, una caja de cachivaches que Twilight dejo fuera de su armario y un objeto cilíndrico le golpeo la espalda,
-Esto es, ¡El telescopio de Twilight!-sus ojos se iluminaron de alegría. –Je, Jeje…JAJAJAJA.
Capitulo 2
Spoiler:
-Que bien, ¡Estoy volando! –Scoot aleteo con fuerza en el aire, por un deseo de alcanzar las blancas y esponjosas nubes. -¡Adiós aburrida tierra firme, Hola emocionantes cielos de Equestria!
Scootaloo empezó a realizar varias piruetas en el aire, emocionada por su primer vuelo. Surcaba los cielos dando giros y vueltas.
-¡Puedo ver Sweet Apple Acres desde esta altura! ¡Voy a tomar desprevenida a Apple Bloom! -Empezó a descender en dirección a la granja, pero algo llamo su atención, unas pequeñas gotas de lluvia que cayeron sobre su crin magenta. Ella observo detenidamente las gotas.
-¿Lluvia…de chocolate? –giro su cuerpo y vio como una gigantesca nube tomaba la forma de una horrorosa araña (¡Incluso ocho gigantescas y peludas patas!), mientras se teñía de un color rojo sangre. – ¡Que carajos es todo esto!
-Sorpresa, sorpresa. ¿Qué tenemos aquí? ¿Una mariposa que ha perdido el rumbo y se encuentra a merced de una araña? –el rostro de la araña tomo la apariencia de Pinkie Pie. -No intentes escaparte, te encuentras a mi merced. –las gotas de chocolate empezaron a solidificarse en unos hilos finos y comenzaron a cruzarse entre todos, hasta formar una gran telaraña.
Scootalo se quedó inmóvil, una araña con el rostro de Pinkie se encontraba justo frente a ella. ¿Qué haría? ¿Enfrentarla? ¿Huir? No estaba muy segura de lo primero y mucho menos de lo segundo. Un mal cálculo y podía convertirse en una hamburguesa de Scootaloo para Itzi Bitzi Pie.
-Ni lo intentes, no podrás escapar. ¿Piensas que una mosca puede ante una araña?
- Puedo, mientras tenga mis alas.
-¿y si no pudieras utilizarlas? –Tomo a la pegaso con sus patas peludas de araña y le mordió el cuello. -¿Lo sientes? Es mi veneno paralizando tu cuerpo.
El Pegaso sintió el cuerpo entumido, intento moverlo, pero todoera inútil, el veneno surtia efecto rapidamente. En sus patas tenía una sensación de hormigueo y un escalofrío recorria todo su cuerpo. Pronto noto que empezaba a respirar con dificultad y su visión se volvía borrosa.
-sabes una cosa, no vales la pena. - Tomo a la potra y la lanzo fuera de su telaraña.
-Entonces, este es mi final. –pensó Scootalo, mientras caía al vacío. –Si solo Rainbow estuviera viva, ¡ella me rescataría! De seguro descendería con una veloz Rainplosión Sónica y evitaría que golpeara con el suelo. –Observo por última vez el cielo y cerró los ojos. –No importa, soy feliz…al fin logre volar.-una gran sonrisa se dibujo en sus labios.
Dia 02 en casa de Twilight Sparkle.
-Scootaloo, despierta Scootaloo…Scootaloo, Scootaloo, ¡Despierta pequeña! Te perderás el desayuno si no te levantas dormilona.-Twilight abrió las cortinas y la habitación se ilumino por la luz del sol.
Scoot abrió lentamente los ojos, deslumbrada por el brillo del astro rey entrando por la ventana.
-Ugh, ¿Ya amaneció? -pregunto Sootaloo, aun adormilada. -¡Entonces todo fue una terrible pesadilla! O tal vez.-sonrio al recordarse volando por los cielos. –¡Tal vez fue el mas maravilloso sueño! - Dio un pequeño bostezo y retiro la sabana que la cubría, observo que tenía una férula en la pata lastimada y conjeturo que Twilight la había puesto mientras dormía
-Bajemos, el desayuno está listo. –Scootaloo observo a la unicornio, Twilight se veía muy risueña aquella mañana
-eh, claro, dame un minuto. –observo con más detenimiento la férula, tenía inscrito las iniciales RB y DH en el. –Twi, ¿Recogiste el telescopio de la cama?
-sí, lo deje en la repisa. Vamos, desayunemos rápido.-Twilight lanza su hechizo de tele transportación y se transportan a la cocina.
Twilight se había esmerado aquella mañana con el desayuno, cereal de froot loops, pan tostado con mermelada, un sándwich vegetariano y un jugo de naranja.
-Perdona Scootaloo, Spike es el que suele cocinar…Yo soy malísima para esto, se me quema hasta el agua.- le dirigió una sonrisa cómplice a la potra.
-no…no importa. –comento avergonzada y sumergió la cuchara sobre el plato de froot loops.se llevo el cereal a la boca, masticando con sumo cuidado. –no me has dicho como te fue con Fluttershy.
Twilight escupió el zumo de naranja al escuchar a Scootaloo. Su cara tomo un color sombrio y lúgubre.
-Por el bien de tu preciosa juventud, debes olvidar que ayer visite a Fluttershy. Lo que ayer sucedió, difícilmente será borrada de mis recuerdos. –Un aire frio rodeo a Twilight al pronunciar esas palabras.
-¿Twi? ¿Qué sucedió ayer con fluttershy?
-No mucho, créeme.
En la mente de Twilight aún se conservaban frescos las palabras de Fluttershy. Su voz suave y delicada aun resonaba en sus recuerdos.
-¿Qué no estas segura de poder cuidar de Scootaloo por unos días? Bueno, yo cuide a las tres en una ocasión.
-sí, lo recuerdo, hiciste un buen trabajo con lo de la cocatriz.
-no, yo no… ¿de verdad crees que hice un buen trabajo?
-sí. Estoy segura de eso.- Respondió Twilight. Fluttershy se sonrojo con aquella oración.
-bueno, supongo que cuidar a una será más fácil. -contesto, mientras jugaba con su crin rosada.
-Aun así. –Twilight bajo la mirada a su taza. -Ella es una pegaso y yo una unicornio. Hay cosas que no se sobre las pegasos. ¿Recuerdas cuando tenías la edad de Scootaloo?
-Tienes mucha razon, las cutie mark crusaders se encuentran en esa edad. Ya sabes cual, donde dejan de ser potrancas…pero aún no son yeguas. Es una confusa y difícil etapa, muchas potrancas no están preparadas para afrontar esos cambios.
-Tú… ¿No estabas lista para esos cambios? –la pegaso se quedó callada, finalmente suspiro. –si no deseas contarme, lo comprendería
-no, está bien. Mis alas comenzaron a crecer demasiado rápido y mi espalda siempre estaba adolorida por su peso. –dio un sorbo a su café y continuo con la historia. –No sabes lo difícil que puede ser para una pony…que todos los potros se la pasen mirando tus alas. Todavía tengo grabada en mi memoria sus lascivas miradas. –Tomo otro sorbo de Café.
-Oye Flushy, ¿No crees que tanto café pueda ponerte un poquitín nerviosa?
–Tranquila Twi, el café no me afecta. –Mordió una galleta y volteo hacia la ventana, era un maravilloso atardecer el que se observaba desde la ventana de la cocina. - Pude soportar sus conductas infantiles y machistas por largo tiempo, ¡realmente no tenía nada de qué avergonzarme! Eso fue antes del incidente de las pantaletas blancas… ¡Todavía puedo sentir sus mirada pervertidas en mi trasero!
-Bueno, supongo que no fue nada de qué avergonzarse.
-¡Porque lo permitiste Celestia! ¡Porque tuve que llevarlas justo el dia de mi primera menstruación! Tan…vergonzoso. –la pegaso se tapó la cara con sus cascos. –Estuve toda la mañana con mis pantaletas manchadas y nadie se dignó a decírmelo…solo escuchaba sus risas y no entendían a que se debía.
-Ok, creo que es suficiente café por hoy.- Tomo la cafetera y lo retiro de la mesa. –Debes dejar de consumir café ecológico de las altas montañas de Mexicolt, te pone voluble.
-Twilight, ¡Aquí tierra llamando a Twiligt!- Scoot movió su pata delantera izquierda frente al inexpresivo rostro de la unicornio.
-Estoy bien…solo recordé, no, no es nada…A propósito ¿Hoy en la noche también observaras las estrellas?
-Sí, se podría decir eso. –Contesto la potra, mientras sonreía irónicamente.
Las estrellas, el gran sueño de todo pony es conocer sus secretos. Maravillas por descubrir, mundos por observar, secretos por revelar…A-BU-RRI-DO, ¿Qué habrá más abajo?
Giro la mira del telescopio en dirección a la habitación de Pinkie.
Veamos, ¿Qué estará tramando ahora? – Encendió una grabadora de voz y lo acerco a su hocico. –Día dos de observación, aun nada raro en la habitación de la señorita Pinkamena Diane Pie. Empiezo a sospechar que será muy difícil descifrar su gran y terrible secreto… ¡Esperen!
Pinkie enciende la luz de su habitación y se alcanza a ver tras las cortinas, lo que parece la silueta de Rainbow y Pinkie sosteniendo un maz. Pinkie empieza golpear con el mazo a la silueta de la pegaso, los cascos de Scootaloo tiemblan, dificultandole seguir observando.
¡Yisus crispis! ¡Ella no está loca, esta desquiciada! –Sintiendo un poco de asco, deja de observar la habitación de Pinkie. -Que Celestia nos ampare, tenemos a una asesina entre cascos. –Se cubre con la cobija, asustada por lo que acaba de observar.
Mientras tanto, en Sugarcube Corner…
-Vaya, ¡Que trabajo tan agotador!- Mueve las cortinas y abre la ventana de su habitación. –Uff, hace mucho calor aquí, así refrescara un poco. –Lame su cuchillo de cocina con mucho placer, luego de dejarlo limpio, empieza a lamerse los cascos . –No sé por qué, pero tengo la sensación de estar siendo observada desde hace rato…Y, ese extraño destello en casa de Twilight me esta perturbando, deberia hacer una visita a otra de mis amigas...Pronto.
Scootaloo empezó a realizar varias piruetas en el aire, emocionada por su primer vuelo. Surcaba los cielos dando giros y vueltas.
Todos mis sueños
se han hecho realidad
dos alas grandes y hermosas
yo tengo ya.
Soy tan dichosa
como el viento silbador
y cual la lluvia que canta
de flor en flor.
Hoy puedo yo volar
con gran facilidad
en ese cielo azul
hacia la libertad.
Hoy sé que en mi interior
Acaba de nacer
lo que soñaba yo
mi verdadero ser.
se han hecho realidad
dos alas grandes y hermosas
yo tengo ya.
Soy tan dichosa
como el viento silbador
y cual la lluvia que canta
de flor en flor.
Hoy puedo yo volar
con gran facilidad
en ese cielo azul
hacia la libertad.
Hoy sé que en mi interior
Acaba de nacer
lo que soñaba yo
mi verdadero ser.
-¡Puedo ver Sweet Apple Acres desde esta altura! ¡Voy a tomar desprevenida a Apple Bloom! -Empezó a descender en dirección a la granja, pero algo llamo su atención, unas pequeñas gotas de lluvia que cayeron sobre su crin magenta. Ella observo detenidamente las gotas.
-¿Lluvia…de chocolate? –giro su cuerpo y vio como una gigantesca nube tomaba la forma de una horrorosa araña (¡Incluso ocho gigantescas y peludas patas!), mientras se teñía de un color rojo sangre. – ¡Que carajos es todo esto!
-Sorpresa, sorpresa. ¿Qué tenemos aquí? ¿Una mariposa que ha perdido el rumbo y se encuentra a merced de una araña? –el rostro de la araña tomo la apariencia de Pinkie Pie. -No intentes escaparte, te encuentras a mi merced. –las gotas de chocolate empezaron a solidificarse en unos hilos finos y comenzaron a cruzarse entre todos, hasta formar una gran telaraña.
Scootalo se quedó inmóvil, una araña con el rostro de Pinkie se encontraba justo frente a ella. ¿Qué haría? ¿Enfrentarla? ¿Huir? No estaba muy segura de lo primero y mucho menos de lo segundo. Un mal cálculo y podía convertirse en una hamburguesa de Scootaloo para Itzi Bitzi Pie.
-Ni lo intentes, no podrás escapar. ¿Piensas que una mosca puede ante una araña?
- Puedo, mientras tenga mis alas.
-¿y si no pudieras utilizarlas? –Tomo a la pegaso con sus patas peludas de araña y le mordió el cuello. -¿Lo sientes? Es mi veneno paralizando tu cuerpo.
El Pegaso sintió el cuerpo entumido, intento moverlo, pero todoera inútil, el veneno surtia efecto rapidamente. En sus patas tenía una sensación de hormigueo y un escalofrío recorria todo su cuerpo. Pronto noto que empezaba a respirar con dificultad y su visión se volvía borrosa.
-sabes una cosa, no vales la pena. - Tomo a la potra y la lanzo fuera de su telaraña.
-Entonces, este es mi final. –pensó Scootalo, mientras caía al vacío. –Si solo Rainbow estuviera viva, ¡ella me rescataría! De seguro descendería con una veloz Rainplosión Sónica y evitaría que golpeara con el suelo. –Observo por última vez el cielo y cerró los ojos. –No importa, soy feliz…al fin logre volar.-una gran sonrisa se dibujo en sus labios.
Dia 02 en casa de Twilight Sparkle.
-Scootaloo, despierta Scootaloo…Scootaloo, Scootaloo, ¡Despierta pequeña! Te perderás el desayuno si no te levantas dormilona.-Twilight abrió las cortinas y la habitación se ilumino por la luz del sol.
Scoot abrió lentamente los ojos, deslumbrada por el brillo del astro rey entrando por la ventana.
-Ugh, ¿Ya amaneció? -pregunto Sootaloo, aun adormilada. -¡Entonces todo fue una terrible pesadilla! O tal vez.-sonrio al recordarse volando por los cielos. –¡Tal vez fue el mas maravilloso sueño! - Dio un pequeño bostezo y retiro la sabana que la cubría, observo que tenía una férula en la pata lastimada y conjeturo que Twilight la había puesto mientras dormía
-Bajemos, el desayuno está listo. –Scootaloo observo a la unicornio, Twilight se veía muy risueña aquella mañana
-eh, claro, dame un minuto. –observo con más detenimiento la férula, tenía inscrito las iniciales RB y DH en el. –Twi, ¿Recogiste el telescopio de la cama?
-sí, lo deje en la repisa. Vamos, desayunemos rápido.-Twilight lanza su hechizo de tele transportación y se transportan a la cocina.
Twilight se había esmerado aquella mañana con el desayuno, cereal de froot loops, pan tostado con mermelada, un sándwich vegetariano y un jugo de naranja.
-Perdona Scootaloo, Spike es el que suele cocinar…Yo soy malísima para esto, se me quema hasta el agua.- le dirigió una sonrisa cómplice a la potra.
-no…no importa. –comento avergonzada y sumergió la cuchara sobre el plato de froot loops.se llevo el cereal a la boca, masticando con sumo cuidado. –no me has dicho como te fue con Fluttershy.
Twilight escupió el zumo de naranja al escuchar a Scootaloo. Su cara tomo un color sombrio y lúgubre.
-Por el bien de tu preciosa juventud, debes olvidar que ayer visite a Fluttershy. Lo que ayer sucedió, difícilmente será borrada de mis recuerdos. –Un aire frio rodeo a Twilight al pronunciar esas palabras.
-¿Twi? ¿Qué sucedió ayer con fluttershy?
-No mucho, créeme.
En la mente de Twilight aún se conservaban frescos las palabras de Fluttershy. Su voz suave y delicada aun resonaba en sus recuerdos.
-¿Qué no estas segura de poder cuidar de Scootaloo por unos días? Bueno, yo cuide a las tres en una ocasión.
-sí, lo recuerdo, hiciste un buen trabajo con lo de la cocatriz.
-no, yo no… ¿de verdad crees que hice un buen trabajo?
-sí. Estoy segura de eso.- Respondió Twilight. Fluttershy se sonrojo con aquella oración.
-bueno, supongo que cuidar a una será más fácil. -contesto, mientras jugaba con su crin rosada.
-Aun así. –Twilight bajo la mirada a su taza. -Ella es una pegaso y yo una unicornio. Hay cosas que no se sobre las pegasos. ¿Recuerdas cuando tenías la edad de Scootaloo?
-Tienes mucha razon, las cutie mark crusaders se encuentran en esa edad. Ya sabes cual, donde dejan de ser potrancas…pero aún no son yeguas. Es una confusa y difícil etapa, muchas potrancas no están preparadas para afrontar esos cambios.
-Tú… ¿No estabas lista para esos cambios? –la pegaso se quedó callada, finalmente suspiro. –si no deseas contarme, lo comprendería
-no, está bien. Mis alas comenzaron a crecer demasiado rápido y mi espalda siempre estaba adolorida por su peso. –dio un sorbo a su café y continuo con la historia. –No sabes lo difícil que puede ser para una pony…que todos los potros se la pasen mirando tus alas. Todavía tengo grabada en mi memoria sus lascivas miradas. –Tomo otro sorbo de Café.
-Oye Flushy, ¿No crees que tanto café pueda ponerte un poquitín nerviosa?
–Tranquila Twi, el café no me afecta. –Mordió una galleta y volteo hacia la ventana, era un maravilloso atardecer el que se observaba desde la ventana de la cocina. - Pude soportar sus conductas infantiles y machistas por largo tiempo, ¡realmente no tenía nada de qué avergonzarme! Eso fue antes del incidente de las pantaletas blancas… ¡Todavía puedo sentir sus mirada pervertidas en mi trasero!
-Bueno, supongo que no fue nada de qué avergonzarse.
-¡Porque lo permitiste Celestia! ¡Porque tuve que llevarlas justo el dia de mi primera menstruación! Tan…vergonzoso. –la pegaso se tapó la cara con sus cascos. –Estuve toda la mañana con mis pantaletas manchadas y nadie se dignó a decírmelo…solo escuchaba sus risas y no entendían a que se debía.
-Ok, creo que es suficiente café por hoy.- Tomo la cafetera y lo retiro de la mesa. –Debes dejar de consumir café ecológico de las altas montañas de Mexicolt, te pone voluble.
-Twilight, ¡Aquí tierra llamando a Twiligt!- Scoot movió su pata delantera izquierda frente al inexpresivo rostro de la unicornio.
-Estoy bien…solo recordé, no, no es nada…A propósito ¿Hoy en la noche también observaras las estrellas?
-Sí, se podría decir eso. –Contesto la potra, mientras sonreía irónicamente.
Las estrellas, el gran sueño de todo pony es conocer sus secretos. Maravillas por descubrir, mundos por observar, secretos por revelar…A-BU-RRI-DO, ¿Qué habrá más abajo?
Giro la mira del telescopio en dirección a la habitación de Pinkie.
Veamos, ¿Qué estará tramando ahora? – Encendió una grabadora de voz y lo acerco a su hocico. –Día dos de observación, aun nada raro en la habitación de la señorita Pinkamena Diane Pie. Empiezo a sospechar que será muy difícil descifrar su gran y terrible secreto… ¡Esperen!
Pinkie enciende la luz de su habitación y se alcanza a ver tras las cortinas, lo que parece la silueta de Rainbow y Pinkie sosteniendo un maz. Pinkie empieza golpear con el mazo a la silueta de la pegaso, los cascos de Scootaloo tiemblan, dificultandole seguir observando.
¡Yisus crispis! ¡Ella no está loca, esta desquiciada! –Sintiendo un poco de asco, deja de observar la habitación de Pinkie. -Que Celestia nos ampare, tenemos a una asesina entre cascos. –Se cubre con la cobija, asustada por lo que acaba de observar.
Mientras tanto, en Sugarcube Corner…
-Vaya, ¡Que trabajo tan agotador!- Mueve las cortinas y abre la ventana de su habitación. –Uff, hace mucho calor aquí, así refrescara un poco. –Lame su cuchillo de cocina con mucho placer, luego de dejarlo limpio, empieza a lamerse los cascos . –No sé por qué, pero tengo la sensación de estar siendo observada desde hace rato…Y, ese extraño destello en casa de Twilight me esta perturbando, deberia hacer una visita a otra de mis amigas...Pronto.
Capitulo 3
Spoiler:
El dormitorio se encontraba a oscuras, Scoot pensaba que asi entraria "en ambiente".
-Probando, probando.-la potra aprieta el botón para reproducir de una pequeña grabadora, el sonido de su voz es reproducido satisfactoriamente, para alegría de la joven yegua.
-Tercer dia de mi investigación sobre el misterioso comportamiento de una poni conocida como Pinkie pie. Famosa por sus dulces y deliciosos pasteles, al igual que por sus fiestas estruendosas.
Detrás de ese dulce carácter y tierna voz se esconde UNA FRIA Y CRUEL ASESINA QUE NO DUDARIA EN MATAR A SUS AMIGAS. –Sonidos de relámpagos.- Bueno… aun no encuentro una prueba convincente y mis movimientos se encuentran limitados por mi pata lesionada…y, puede que la mayor parte de mi investigación se base en pura especulación.
La potra empieza a aletear y a elevarse unos centímetros de su cama, observa sus cascos delanteros y toma aire.
-…pero tengo un mal presentimiento, como si algo terrible fuera a suceder.–sonido de puerta rechinando, Twilight entra en la habitación.
–Scootaloo, deberías abrir las cortinas, este cuarto se ve bastante tétrico.-Twilight abre las cortinas y el cuarto se ilumino con la luz del sol. –me preocupa que por este pequeño percance tengas que retrasarte en tus estudios.
-Bueno, no es tan importante, de todas formas no soy tan buena estudiante.
-¿Qué no es tan importante? ¡Piensa en tu futuro! ¡Que pasaría si no pudieras entrar en una buena universidad con tus calificaciones! –Twilight sacude con fuerza a Scoot y hace que su cabeza rebote de atrás para adelante.
-Y me lo dice la alumna perfeccionista que termino de bibliotecaria en el pueblo mas aburrido de Equestria. –comento sarcásticamente la aun mareada pegaso. –Y con un salario raquítico.
-Oye, no soy tan perfeccionista! –contesta ofendida la unicornio.
-¿De verdad?, ¡Corrijes los errores ortográficos de los diccionarios! ¡Ordenas tus plumas por colores!...anotas todas las actividades en tu diario. -sacando
-Espera, ¿ese es mi diario?
-Querido diario, hoy convenci a Sweety Belle de traerle la tarea a Scootaloo, ella es tan noble que decidio ayudarme.
...
Sweety Belle trotaba con su morral a la espalda, le había prometido a Twilight que le llevaría la tarea a Scootaloo.
Era medio dia y el sol se encontraba en su cenit. S-Belle decidio tomar la ruta de las arboledas, asi se podria proteger del inclemente sol.
-Fue una buena idea, aunque tarde un poco en llegar a la biblioteca, puedo escuchar el sonido de los pajaros y las copas de los arboles me cubren del sol...nada podria salir mal. -si Sweetie hubiese bajado la mirada, o al menos no tan distraida por sus pensamientos, habria notado un enorme charco de lodo a unos cuantos pasos frente a ella.
por suerte, un joven alicornio de crin rubia, pelaje blanco, ojos azul rey y aroma a lavanda se encontraba en las cercanias.
-Oh, pequeña unicornio, ¡Frente a ti hay un enorme charco de lodo! Fijate por donde caminas o podrias sufrir un accidente.
Sweety Belle volteo, justo detras del tronco de un arbol, salio el alicornio que le habia avisado del charco de lodo. Habia algo en su mirada que la hacia sentir extraña, un sentimiento que solo habia imaginado leyendo las novelas de Twilight.
-¿Acaso es amor? ¿Acaso el es el semental de mis sueños?
-señorita Sweetie belle ¿Se siente bien?
-Este...yo.- SB se sentia bastante avergonzada porque el extraño habia mencionado su nombre. -oh, lo siento, tengo que entregarle su tarea a una amiga...si me disculpa.
-Pero, apenas nos conocemos, ¿No te gustaria acompañarme a mi departamento?
-Acompañarte a tu departamento. -contesto SB, hipnotizada por la belleza del semental.
-De seguro, tus padres no se preocuparan por ti. -
-Mis padres no se preocuparan por mi. -soltó su morral y siguió al misterioso semental.
-Tu me amas.
-Yo te amo. -repitió, automáticamente.
...
-Vaya vaya, creo que he visto este morral antes. - Pinkie pie, quien se encontraba recogiendo moras por las cercanias, dejo la canasta que llevaba y levanto el morral. - Lo supuse, Sweetie Belle, esa chica no sabe donde tiene la cabeza...uno de estos dias terminara secuestrada, muerta o las dos cosas.
...
-Auch, me duele mucho la cabeza!-algo apretaba su patas y evitaba que se pusiera de pie, ella abrio los ojos y miro al alicornio que encontro segundo antes que todo se pusiera confuso .- ¿Qui..?¿Quien eres y que hago aqui? -
-Oh, veo que mi "glamour" ya no te afecta, que lastima...deseaba que hicieramos esto sin que gritaras..MUCHO.
-¿Esto es una broma? ¡Dime que es una broma!
el apuesto alicornio volteo, su hocico dibujaba una cruel sonrisa y su caminar helaba la sangre de la potra. -he dejado mi antigua vida por ti, mi pequeño angel, mis amigos, mi familia...ellos no me comprendían, incluso crei que esos bronies lo harían. -escupio al piso y camino en direccion a una puerta. Se que amaras esto. -Abrio la puerta. Ponys, varios ponys.
-esto es...
-hermoso, lo se, no podia dejar a esas tristes criaturas alejarse de mi. veras, cuando eres un bronie, es difícil para ti dejar ir a alguien que amas,nosotros les damos tanto amor...y ellas, ¡ELLAS! solo son unas desagradecidas...por eso las diseque, asi puedo tenerlas conmigo,para siempre.
...
-¡Pinkie! ¡Tu, monstruo! ¡Que le hiciste a Sweetie! -Grito Scootaloo al ver a pinkie entrar al pueblo, su pata aun no estaba en condiciones optimas, pero eso no le impidio venir a "saludarla".
-No se de que hablas. -contesto secamente la pony rosa.
-Dime, ¿Porque traes el morral de Sweetie contigo? ¿Acaso acabas de matarla y regresas de esconder su cadaver? -Scoot le escupe a la cara
-Pequeña, ¡madura! la vida no es una novela donde hay buenos y malos, por favor ¿puedes quitarte de en medio?
-Jamas! ¡Primero muerta! -contesta, mientras se pone en pose de ataque.
Pinkie intenta rodearla, pero ella se interpone a cada paso, finalmente le da una ligera patada en la pata mala y scoot cae de espalda, retorciendose de dolor.
-gracias por tu comprención, si me disculpas...voy a preparar un pastel para una fiesta privada a la que no he sido invitada.
-maldición, la tenia en mis cascos..maldita pata! -grita,mientras la pony rosa se aleja.
...
-Piensa cosas lindas Sweetie, piensas cosas lindas. -susurraba en voz baja la pequeña unicornio, su cuerpo se encontraba paralizado del miedo, deseaba gritar, pero temia que su secuestrador le hiciera algo malo si la descubria gritando. -Gatitos, perritos, conejitos...un arcoiris, un algodon de azucar.
-Deja de temblar Sweetie Belle, me pones nerviosa. - el sonido del cuchillo al ser afilado hacia eco por todo el lugar.
-Gorriones volando en el cielo, nubes de formas graciosas, un brillante sol sobre las colinas...¡Porque Celestia! ¡Porque me abandonas en un momento como este! -los ojos de Sweety habian enrojecido de tanto llorar. ¿Podia ser esto solo una prueba de fe de parte de celestia?, si era asi, ella habia fracasado...deseaba tanto vivir, si pudiera, venderia su alma al primer demonio que encontrara si ello permitia mantenerse viva...Lo deseaba con toda su alma.
Un fuerte sonido...pedazos de vidrio cayendo...alguien entrando por la ventana...un relampago iluminando la habitacion...una pony rosa sonriendo y pequeñas cortadas en su cara...un pastel sostenido en sus patas delanteras, con una mano humana en el centro de este.
-¡Feliz secuestro forzado alicornio bastardo! ¡Te traje un pastel que de seguro disfrutaras!
-Vaya, ¿acaso te sientes una heroina, señorita pinkamena? ¡Te recuerdo que soy un Alicornio, tengo poderes mas alla de tu comprension!
-¿Heroina? ¡Que va! solo le traje un pastel para un triste humano que se convirtio en pony. -contesto tranquilamente.
La habitacion era pequeña, demasiado para poder usar sus alas con libertad, sus hechizos tampoco serian utiles, un hechizo ofensivo, que se saliera de control, podria llamar la atencion de ponys indeseables. Observo el rostro de Pinkamena, ¡Acaso ella habia previsto todo!...el glamour, ¿podria funcionar el glamour?
-¿En que piensas? ¡Pense que esto era una fiesta! -el sonido de un espantasuegras se escucho por toda la habitacion, acompañado de unos pasos. -¿Que sucede? ¿acaso tienes miedo?¡Eres un alicornio, tienes todo el poder a tu disposicion y te quedas temblando por una yegua terrestre! ¡Eres patetico! -el sonido del pastel al piso y ella pisandolo se escucho por toda la habitación. -dime una cosa, ¿Cual es tu nombre?
el alicornio intento armarse de valor y enfrentar a la yegua.
-No te acerques a mi, sucia ramera!¡Soy lux Aeterna y soy mas rápido que Rainbow Dash, mas fuerte que AppleJack, conozco mas conjuros que Twilight!
Oh, ¡que ternura! -se abalanzo sobre el alicornio y le abrió la garganta de un solo corte, la sangre aun calida broto rápidamente de su cuello cercenado. las paredes quedaron manchadas por la sangre, Pinkie se lamio la sangre en sus cascos.
Sweetie Belle, unica testigo de la masacre, contuvo la respiracion. Si ella pudo asesinar a un alicornio adulto, ¿Que esperanzas le quedarian a una unicornio incapaz de hacer el mas minimo hechizo basico? cerro los ojos y apreto los dientes, en espera de su fin.
Escucho los pasos de la yegua acercandose, su corazon se aceleraba a cada paso. La sentia acercarse cada vez mas, paso a paso, el vaho de su aliento haciendose visible entre la poca luz de la habitacion, su cuerpo bloqueando las fuentes de luz, una gota de sangre cayendo sobre su pelaje.
Pinkie tomo su cuchillo y corto las cuerdas que mantenian inmovil a la potra.
-Listo, ya puedes largarte de este tonto lugar...Tus padres deben estarmuy preocupados.
-pe..pero, ¿Acaso no piensas matarme?
-Je, ¡Alguien tiene mucho tiempo juntandose con Scootaloo! - dio media vuelta y se dirigio hacia el cadaver del alicornio.-¡Que te parezco! ¿una genocida psicopata? ¡Por favor, soy Pinkie Pie! ¡Fiestas, risas, canciones, globos coloridos!- Encendio un cigarrillo y se dirigio hacia la cocina, de donde volvio con una caja de botellas de cerveza. -No soy mas que la dulce, tierna...algo energica y molesta, la mayoria de las veces...pero una confiable amiga al final de cuentas. - destapando una de las cheves. -¿quieres una?
-Pinkie, soy menor de edad. -contesto timidamente SB.
-Oh, ¡disculpame! -Bebio un trago, luego fue destapando las demas y una por una las fue arrojando al cuerpo inerte del alicornio. -Yo tengo una orden gigantesca de Brownies que preparar...y mira que estamos atravesando por una insultante escazes de chocolate en la region, si vieras lo que me ha costado conseguirlo, ¡No he dormido en dias!
-Sabes que, tienes razon ¡Esto esto es una fiesta y se veria mal si no bebiera algo! -tomo la ultima botella de la caja, la destapo y probo el contenido etilico de esta. -sabes, empieza a hacer frio en este lugar.
SB le arrebato el cigarro de entre los labios a pinkie y lo lanzo al cadaver. El cuerpo empezo a producir unas llamas que empezaron a calentar la habitacion.
-Sabes, esto se siente...calido. -comento la pequeña unicornio.
-Solo no lo olvides, debemos irnos antes que lleguen la policia.
-Probando, probando.-la potra aprieta el botón para reproducir de una pequeña grabadora, el sonido de su voz es reproducido satisfactoriamente, para alegría de la joven yegua.
-Tercer dia de mi investigación sobre el misterioso comportamiento de una poni conocida como Pinkie pie. Famosa por sus dulces y deliciosos pasteles, al igual que por sus fiestas estruendosas.
Detrás de ese dulce carácter y tierna voz se esconde UNA FRIA Y CRUEL ASESINA QUE NO DUDARIA EN MATAR A SUS AMIGAS. –Sonidos de relámpagos.- Bueno… aun no encuentro una prueba convincente y mis movimientos se encuentran limitados por mi pata lesionada…y, puede que la mayor parte de mi investigación se base en pura especulación.
La potra empieza a aletear y a elevarse unos centímetros de su cama, observa sus cascos delanteros y toma aire.
-…pero tengo un mal presentimiento, como si algo terrible fuera a suceder.–sonido de puerta rechinando, Twilight entra en la habitación.
–Scootaloo, deberías abrir las cortinas, este cuarto se ve bastante tétrico.-Twilight abre las cortinas y el cuarto se ilumino con la luz del sol. –me preocupa que por este pequeño percance tengas que retrasarte en tus estudios.
-Bueno, no es tan importante, de todas formas no soy tan buena estudiante.
-¿Qué no es tan importante? ¡Piensa en tu futuro! ¡Que pasaría si no pudieras entrar en una buena universidad con tus calificaciones! –Twilight sacude con fuerza a Scoot y hace que su cabeza rebote de atrás para adelante.
-Y me lo dice la alumna perfeccionista que termino de bibliotecaria en el pueblo mas aburrido de Equestria. –comento sarcásticamente la aun mareada pegaso. –Y con un salario raquítico.
-Oye, no soy tan perfeccionista! –contesta ofendida la unicornio.
-¿De verdad?, ¡Corrijes los errores ortográficos de los diccionarios! ¡Ordenas tus plumas por colores!...anotas todas las actividades en tu diario. -sacando
-Espera, ¿ese es mi diario?
-Querido diario, hoy convenci a Sweety Belle de traerle la tarea a Scootaloo, ella es tan noble que decidio ayudarme.
...
Sweety Belle trotaba con su morral a la espalda, le había prometido a Twilight que le llevaría la tarea a Scootaloo.
Era medio dia y el sol se encontraba en su cenit. S-Belle decidio tomar la ruta de las arboledas, asi se podria proteger del inclemente sol.
-Fue una buena idea, aunque tarde un poco en llegar a la biblioteca, puedo escuchar el sonido de los pajaros y las copas de los arboles me cubren del sol...nada podria salir mal. -si Sweetie hubiese bajado la mirada, o al menos no tan distraida por sus pensamientos, habria notado un enorme charco de lodo a unos cuantos pasos frente a ella.
por suerte, un joven alicornio de crin rubia, pelaje blanco, ojos azul rey y aroma a lavanda se encontraba en las cercanias.
-Oh, pequeña unicornio, ¡Frente a ti hay un enorme charco de lodo! Fijate por donde caminas o podrias sufrir un accidente.
Sweety Belle volteo, justo detras del tronco de un arbol, salio el alicornio que le habia avisado del charco de lodo. Habia algo en su mirada que la hacia sentir extraña, un sentimiento que solo habia imaginado leyendo las novelas de Twilight.
-¿Acaso es amor? ¿Acaso el es el semental de mis sueños?
-señorita Sweetie belle ¿Se siente bien?
-Este...yo.- SB se sentia bastante avergonzada porque el extraño habia mencionado su nombre. -oh, lo siento, tengo que entregarle su tarea a una amiga...si me disculpa.
-Pero, apenas nos conocemos, ¿No te gustaria acompañarme a mi departamento?
-Acompañarte a tu departamento. -contesto SB, hipnotizada por la belleza del semental.
-De seguro, tus padres no se preocuparan por ti. -
-Mis padres no se preocuparan por mi. -soltó su morral y siguió al misterioso semental.
-Tu me amas.
-Yo te amo. -repitió, automáticamente.
...
-Vaya vaya, creo que he visto este morral antes. - Pinkie pie, quien se encontraba recogiendo moras por las cercanias, dejo la canasta que llevaba y levanto el morral. - Lo supuse, Sweetie Belle, esa chica no sabe donde tiene la cabeza...uno de estos dias terminara secuestrada, muerta o las dos cosas.
...
-Auch, me duele mucho la cabeza!-algo apretaba su patas y evitaba que se pusiera de pie, ella abrio los ojos y miro al alicornio que encontro segundo antes que todo se pusiera confuso .- ¿Qui..?¿Quien eres y que hago aqui? -
-Oh, veo que mi "glamour" ya no te afecta, que lastima...deseaba que hicieramos esto sin que gritaras..MUCHO.
-¿Esto es una broma? ¡Dime que es una broma!
el apuesto alicornio volteo, su hocico dibujaba una cruel sonrisa y su caminar helaba la sangre de la potra. -he dejado mi antigua vida por ti, mi pequeño angel, mis amigos, mi familia...ellos no me comprendían, incluso crei que esos bronies lo harían. -escupio al piso y camino en direccion a una puerta. Se que amaras esto. -Abrio la puerta. Ponys, varios ponys.
-esto es...
-hermoso, lo se, no podia dejar a esas tristes criaturas alejarse de mi. veras, cuando eres un bronie, es difícil para ti dejar ir a alguien que amas,nosotros les damos tanto amor...y ellas, ¡ELLAS! solo son unas desagradecidas...por eso las diseque, asi puedo tenerlas conmigo,para siempre.
...
-¡Pinkie! ¡Tu, monstruo! ¡Que le hiciste a Sweetie! -Grito Scootaloo al ver a pinkie entrar al pueblo, su pata aun no estaba en condiciones optimas, pero eso no le impidio venir a "saludarla".
-No se de que hablas. -contesto secamente la pony rosa.
-Dime, ¿Porque traes el morral de Sweetie contigo? ¿Acaso acabas de matarla y regresas de esconder su cadaver? -Scoot le escupe a la cara
-Pequeña, ¡madura! la vida no es una novela donde hay buenos y malos, por favor ¿puedes quitarte de en medio?
-Jamas! ¡Primero muerta! -contesta, mientras se pone en pose de ataque.
Pinkie intenta rodearla, pero ella se interpone a cada paso, finalmente le da una ligera patada en la pata mala y scoot cae de espalda, retorciendose de dolor.
-gracias por tu comprención, si me disculpas...voy a preparar un pastel para una fiesta privada a la que no he sido invitada.
-maldición, la tenia en mis cascos..maldita pata! -grita,mientras la pony rosa se aleja.
...
-Piensa cosas lindas Sweetie, piensas cosas lindas. -susurraba en voz baja la pequeña unicornio, su cuerpo se encontraba paralizado del miedo, deseaba gritar, pero temia que su secuestrador le hiciera algo malo si la descubria gritando. -Gatitos, perritos, conejitos...un arcoiris, un algodon de azucar.
-Deja de temblar Sweetie Belle, me pones nerviosa. - el sonido del cuchillo al ser afilado hacia eco por todo el lugar.
-Gorriones volando en el cielo, nubes de formas graciosas, un brillante sol sobre las colinas...¡Porque Celestia! ¡Porque me abandonas en un momento como este! -los ojos de Sweety habian enrojecido de tanto llorar. ¿Podia ser esto solo una prueba de fe de parte de celestia?, si era asi, ella habia fracasado...deseaba tanto vivir, si pudiera, venderia su alma al primer demonio que encontrara si ello permitia mantenerse viva...Lo deseaba con toda su alma.
Un fuerte sonido...pedazos de vidrio cayendo...alguien entrando por la ventana...un relampago iluminando la habitacion...una pony rosa sonriendo y pequeñas cortadas en su cara...un pastel sostenido en sus patas delanteras, con una mano humana en el centro de este.
-¡Feliz secuestro forzado alicornio bastardo! ¡Te traje un pastel que de seguro disfrutaras!
-Vaya, ¿acaso te sientes una heroina, señorita pinkamena? ¡Te recuerdo que soy un Alicornio, tengo poderes mas alla de tu comprension!
-¿Heroina? ¡Que va! solo le traje un pastel para un triste humano que se convirtio en pony. -contesto tranquilamente.
La habitacion era pequeña, demasiado para poder usar sus alas con libertad, sus hechizos tampoco serian utiles, un hechizo ofensivo, que se saliera de control, podria llamar la atencion de ponys indeseables. Observo el rostro de Pinkamena, ¡Acaso ella habia previsto todo!...el glamour, ¿podria funcionar el glamour?
-¿En que piensas? ¡Pense que esto era una fiesta! -el sonido de un espantasuegras se escucho por toda la habitacion, acompañado de unos pasos. -¿Que sucede? ¿acaso tienes miedo?¡Eres un alicornio, tienes todo el poder a tu disposicion y te quedas temblando por una yegua terrestre! ¡Eres patetico! -el sonido del pastel al piso y ella pisandolo se escucho por toda la habitación. -dime una cosa, ¿Cual es tu nombre?
el alicornio intento armarse de valor y enfrentar a la yegua.
-No te acerques a mi, sucia ramera!¡Soy lux Aeterna y soy mas rápido que Rainbow Dash, mas fuerte que AppleJack, conozco mas conjuros que Twilight!
Oh, ¡que ternura! -se abalanzo sobre el alicornio y le abrió la garganta de un solo corte, la sangre aun calida broto rápidamente de su cuello cercenado. las paredes quedaron manchadas por la sangre, Pinkie se lamio la sangre en sus cascos.
Sweetie Belle, unica testigo de la masacre, contuvo la respiracion. Si ella pudo asesinar a un alicornio adulto, ¿Que esperanzas le quedarian a una unicornio incapaz de hacer el mas minimo hechizo basico? cerro los ojos y apreto los dientes, en espera de su fin.
Escucho los pasos de la yegua acercandose, su corazon se aceleraba a cada paso. La sentia acercarse cada vez mas, paso a paso, el vaho de su aliento haciendose visible entre la poca luz de la habitacion, su cuerpo bloqueando las fuentes de luz, una gota de sangre cayendo sobre su pelaje.
Pinkie tomo su cuchillo y corto las cuerdas que mantenian inmovil a la potra.
-Listo, ya puedes largarte de este tonto lugar...Tus padres deben estarmuy preocupados.
-pe..pero, ¿Acaso no piensas matarme?
-Je, ¡Alguien tiene mucho tiempo juntandose con Scootaloo! - dio media vuelta y se dirigio hacia el cadaver del alicornio.-¡Que te parezco! ¿una genocida psicopata? ¡Por favor, soy Pinkie Pie! ¡Fiestas, risas, canciones, globos coloridos!- Encendio un cigarrillo y se dirigio hacia la cocina, de donde volvio con una caja de botellas de cerveza. -No soy mas que la dulce, tierna...algo energica y molesta, la mayoria de las veces...pero una confiable amiga al final de cuentas. - destapando una de las cheves. -¿quieres una?
-Pinkie, soy menor de edad. -contesto timidamente SB.
-Oh, ¡disculpame! -Bebio un trago, luego fue destapando las demas y una por una las fue arrojando al cuerpo inerte del alicornio. -Yo tengo una orden gigantesca de Brownies que preparar...y mira que estamos atravesando por una insultante escazes de chocolate en la region, si vieras lo que me ha costado conseguirlo, ¡No he dormido en dias!
-Sabes que, tienes razon ¡Esto esto es una fiesta y se veria mal si no bebiera algo! -tomo la ultima botella de la caja, la destapo y probo el contenido etilico de esta. -sabes, empieza a hacer frio en este lugar.
SB le arrebato el cigarro de entre los labios a pinkie y lo lanzo al cadaver. El cuerpo empezo a producir unas llamas que empezaron a calentar la habitacion.
-Sabes, esto se siente...calido. -comento la pequeña unicornio.
-Solo no lo olvides, debemos irnos antes que lleguen la policia.