Conde Roquefort intenta hacer una bola de paja, pero esta paja esta demasiado seca, y a la minima que intenta doblarlo se rompe, le es imposible hacer una bola de paja con las pezuñas, de todas maneras, si consiguiera hacer una bola de paja, es muy probable que al lanzarla se deshaga en el aire.
Algo pasa entre los barrotes de la puerta, Conde Roquefort le pilla desprevenido.
Conde Roquefort siente como si unos dientes afilados le estuvieran mordiendo el cuello, cuanto más se agita, mas le duele.
Como no, mira quien tenia que volver, y encima más "graciosillo" que antes...
Conde Roquefort es sacado de su celda y conducido por un pasillo cual perro amaestrado, mientras camina escucha alaridos de dolor que provienen de las demás celdas, parece ser que no hay solo dos celdas, sino que hay unas 6 como minimo.
Continuan por el camino y llegan a una pequeña sala, hay un aparato enorme en ella.
Este torturador obliga a Conde Roquefort a poner las pezuñas donde le dice
Conde Roquefort intenta resistirse, pero si no obedece el torturador va a retorcer esa "correa dentada de acero" para hacerle daño.