¡Oh! No hace falta por mí parte decir nada más, Mi Noble Señora, pues no necesitáis que os indiquen lo que por vuestros propios ojos podéis ver. Pero, ante los demás, menos esclarecidos de mente que Mi Señora, lo aclararé: una vez que Edi ha admitido que ha mentido en algo, ¿qué otras falsedades no habrá introducido en su discurso?
Además, últimamente, Edi se ha mostrado indolente y despreocupado, cómo si no le importara ser despedido. He visto que aún no ha ido a arreglar el
pararayos, como se le encargo hace ya cuatro días, y que las piezas de cerámica india que se encargaron a la fábrica de
Kolala, que él debía guardar en el almacén, siguen cogiendo polvo en sus cajas en el garaje. Tanto que al chófer vive ya como una
pesadilla diaria el encontrar la forma de aparcar sin darle a alguna de ellas... Es como si planeara irse del castillo y confiara en tener los recursos necesarios para ello...
Por otro lado, no me extrañaría que me viese saliendo. Como he dicho, no hay contradicción en mis palabras, yo cogí las piezas del almacén, las empleé en aquello que he dicho y las devolví. Evidentemente, en un primer momento, las saque y luego, posteriormente, las devolví. Ya ha quedado demostrado y se ha visto que las piezas que use para ilustrar a Geballo siguen en su sitio y no hay quien me pueda acusar de hurto. Eso es lo último que haría.
Palabras: Asilo - Pistola - Nave espacial
OFF: No tenía ni idea de lo que era Kolala... Pensé que quizá era Koala y que Edi había escrito con una errata, pero de todas formas busqué en Google y encontré que era un nombre personal y un topónimo de varios lugares. Lo he usado con el sentido de topónimo.