Macdolia sabía lo que había visto... pero prefirió quedarse callada unos instantes sin decir nada.
Tan solo murmuró algo, con el semblante ensombrecido.
-Es un evento anclado en el tiempo... pero aun así duele no haber podido haber hecho nada... maldición...
Pasados unos minutos, Macdolia se acercó a Greenshy.
-Conozco bien el recuerdo que hemos visto. Hiciste mucho daño en aquel mundo, no lo niego... ¿pero crees que con tu muerte arreglarás algo? Ninguna de las ponis a las que asesinaste volverán. Pero hay una cosa que si puedes hacer: intentar compensar tus errores impidiendo que otros los cometan. Y debes hacerlo por los recuerdos que tienes de la yegua a la que amabas. Esos recuerdos son tu tesoro mas preciado...
...
-Recuerdos...
Macdolia ayudó a Greenshy a levantarse.
-Ven, quiero que veas esto -espero que funcione aquí dentro, pensó. Es un sueño, debería poder permitirme hacerlo.
La yegua se tocó su CM y su reloj se materializó ante ella. Se lo llevó a los labio y susurró "Activar Modo Reminiscencia. Reproducir Secuencia 0001."
El reloj brilló y proyectó un holograma. que llenó todo el espacio, como si de una reproducción en 3D se tratase. En el aparecían dos ponis, una unicornio con gafas de pelaje azulado, crin rosada con mechones negros y una Pluma goteando tinta por CM; y un poni de tierra también con gafas de pelaje azul oscuro y crin negra con un libro del que sobresalía un marcapáginas por CM.
-¿Que era lo que me querías contar, Wind Art? No será otra de tus alocadas ideas... -empezó el poni de tierra.
La yegua sonrió de manera inquietante. Casi parecía que le brillaban los ojos.
-¡Jo jo jo! Esto es más que una idea alocada. ¡Es la sublimación de las ideas alocadas! Solo tenemos que esperar a que ellas dos lleguen.
El poni se rascó el pescuezo.
-Tengo un mal presentimiento de esto...
La yegua sonrió.
-No deberías. Después de esto, no volveré a hacerte coletas en la crin. Pinkie Promise.
El poni se sorprendió para luego... alegrarse.
-¡¿De verdad?!
Wind Art sonrió.
-Ay McDohl, McDohl... que poca fe tienes en mí.
El poni volvió a enfurruñarse.
-No me llames por mi Nick. Solo lo utilizo en EquestriardHands.com.
-Es que Bookmark Act es muy largo -dijo Wind Art sacando la lengua.
La conversación se vio interrumpida por la llegada de dos pegasos: una era azulada con la crin multicolor. La otra, gris con el cabello dorado... y los ojos algo peculiares.
-¡Si son Rainbow Dash y Derpy!
-¡Aquí estamos! -dijo Derpy con una sonrisa.
-¿Para que necesitáis a una poni tan molona como yo? -intercedió Rainbow.
Bookmark Act se alzó de hombros.
-Ni idea. Fue Wind Art quien nos citó aquí.
Rainbow Dash miró a la yegua.
-¿Wind Art? ¿La artista conocida por esas novelas ilustradas tan extrañas donde sus protagonistas siempre parece que estén cambiados de sexo?
-¿Y como chabes tu echo, Rainbow Dash? -preguntó Derpy.
La yegua azul empezó a sonrojarse.
-Er... Twilight me lo contó un día que fui a la biblioteca por un libro de Daring Do, jejeje.
Todos miraron al Elemento de la Lealtad con cara de circunstancias.
-En fin, ¡gracias a todos por venir! -gritó Wind Art- ¡Estoy supercontenta! Después de años de investigación, creo que he desarrollado un hechizo que me permitirá escribir mis novelas con una exactitud pasmosa... ¡y necesitaba que vosotros tres estuvieseis aquí para verlo! Necesito que Rainbow Dash y Derpy se pongan cada una a un lado tuyo -las yeguas obedecieron-. Ahora solo tengo que concentrarme...
-¡Espera! ¡No nos has dicho que pretendes! -gritó Bookmark.
Pero fue demasiado tarde. La yegua se había puesto a concentrar gran cantidad mágica. Fue tanta la energía que concentró que los ojos se le pusieron blancos y empezaron a saltar chispas de su cuerno.
-¡ESPE...!
BOOOOOM
Bookmark no llegó a acabar esa palabra antes de que un enorme rayo lanzado por Wind Art les alcanzase a él y a las dos pegasos, produciéndose un estallido y lanzándolos por los aires...
Cuando los tres pudieron ponerse en pie, se acercaron corriendo a Wind Art, ignorando a enorme humareda que había quedado donde el rayo les había alcanzado.
-¿Que has hecho, descerebrada?
-¡Que chusto! ¡No ha tenido gracia!
-Ha sido molón, si... ¡pero no ha molado nada recibirlo de lleno!
Los tres increpaban a Wind Art... hasta que empezaron a ver algo al tiempo que la humareda se despejaba.
Se trataba de un poni de facciones parecidas a las de Bookmark... pero con peculiaridades: la crin era muchísimo mas larga, sus ojos eran verdes en vez de marrones, su pelaje era magenta oscuro en vez de azul, su CM no era un libro, sino que parecía un reloj de bolsillo... y lo mas importante: era una yegua.
-¿Que..Que? ¿Qué es esto?... Wind Art... ¿Qué has hecho..?
-¡Yupiiiii! ¡Ha funcionado! Os lo voy a explicar. Este es un hechizo mío que permite crear un poni replica del sexo contrario al poni que se utilice de base, pero para ello necesito un canalizador muy potente del sexo al que quería cambiar, por eso Derpy y Rainbow Dash eran necesarias para poder invertir el sexo... lo que no entiendo es porque es roja y la CM es otra... debería ser igual que la base, solo que en yegua.
Bookmark abrió los ojos, horrorizado.
-¡Era lo que quería decirte! ¡Que me dejases dejar las cosas antes de actuar! Mira esto.
Bookmark hurgó en su alforja... y sacó un pequeño cuaderno. En el se leía "Viajes Espaciotemporales para proteger Animales"
-Esto es la historia preliminar que desarrollé a partir de este título tan absurdo que me diste. No tengo escrito nada más, pero te lo traía para que lo vieses. ¡Lee la descripción de la protagonista!
Wind Art dio un vistazo: aunque algunas cosas estaban cambiadas, si que apreció que en él venían detallados algunos aspectos que ahora se veían en la yegua que tenían delante. Aquello le hizo preocuparse
-Pero es temporal, tranquilos -dijo, recuperando la sonrisa-. Solo debería durar unos minutos antes de desvanecerse, no puede ni hablar siquie...
-¿Q... que ocurre?... ¿Por qué estoy...? ¿Qué pasa con mis recuerdos...? ¿Por qué estoy ahí delante... si estoy aquí...? ¿Quién soy?
...
La imagen se congeló y la reproducción desapareció.
-Ya lo has visto, Greenshy: ni siquiera soy una poni normal como los demás. Fui creada a partir de una magia de mi "Madre" usando a mi "padre" como base... pero el hechizo se mezcló con su novela, dándome este reloj... y mezclando su escrito con los recuerdos de las otras dos yeguas. No poseo recuerdos, solo los de dos vidas que nunca me pertenecieron... y una misión que me fue otrogada por la pluma de mi "Padre"; ¿sabes lo que significa no tener recuerdos propios y no poder luchar por ellos? Eres muy afortunado, Greenshy, por poseerlos, pues aunque te produzcan dolor, son la prueba de tu existencia y puedes luchar por ellos... ¡No permitas que todos ellos sean en vano poniendo fin a tu existencia aquí! Aférrate a ellos, levántate... y lucha.