Mientras Rainbow Dash cargaba con Brownie y con ella misma para superar la masa nubosa... Una voz llegó a Macdolia, gracias al poder del reloj... Era la petición de un amigo que seguía en apuros. La magia de Luna distorsionó el mensaje... pero captó lo que quería decir. La yegua sonrió.
"Procuraré tener éxito... y cuando nos volvamos a encontrar, podré mirarte a los ojos darte la noticia que esperas".
Mientras, la pegaso de crin arcoíris seguí esforzándose por subirles arriba de aquellos nubarrones... y Macdolia no pudo dejar de preguntarse algo.
"¿Es casualidad o destino que, justo después de cruzarme con Scoots, termine liberando y formando equipo... justamente con ella?"
...
No... Nunca se puede dejar nada al azar. Rainbow Dash se había cruzado de nuevo en su camino por un motivo. Por una razón.
Macdolia miró al elemento de la lealtad... A pesar de los años... seguía siendo extraño contemplar fuera de si un cuerpo y un aspecto... que recordaba haber sido.
"Nunca tuve la entereza de preguntarle a la Rainbow Dash de mi mundo por esto... Pero quizás..."
-¿Rainbow.... puedo preguntarte una cosa?
La pegaso la miró con esa mirada que denotaba decisión y confianza.
-Tienes una duda y se la haces a la mejor pegaso de Equestria, ¿eh? ¡Claro! ¡Dispara!
Macdolia lanzó un suspiro y ronrió. Esa actitud... Nunca cambia no importa el espacio.
-Verás... Se que eres el Elemento de la Lealtad... así que creo que no hay nadie mejor para contestarme esto: Imagina... que tuvieses una mejor amiga... a la que, llegado cierto día, nunca, jamás, pudieses volver a ver... y recordarla no hiciera sino causarte dolor una y otra vez, a pesar de tener recuerdos maravillosos de ella.... ¿verías como una traición querer pasar página, olvidándola poco a poco, asumiendo que nunca volverá y seguir adelante?