Atendiendo a las demandas de algunas personas del foro, he continuado con la historia de Loud Off, y estoy pensando en más capítulos, ya que me piden más. Ha sido una verdadera sorpresa que un personaje OC tan extraño, como es Loud Off, haya tenido un éxito inesperado, al menos, para mi.
En fin, espero que os guste el segundo capítulo de mis fics de MLP, un saludo, y buenas noches a todos
La magia de la amistadYa habían pasado unas semanas desde que me mudé a Ponyville y me empecé a hospedar en Sweet Apple Acres con Applejack y el resto de su familia, habían sido unas semanas muy agradables. Ahora mismo, me dirigía junto a Applejack al mercado de Ponyville, arrastrando el carro de manzanas.
-Te agradezco que me hayas acompañado hasta el mercado, Loud Off. -me decía Applejack. -Siento haberte hecho venir desde Sweet Apple Acres, sé que aún no conoces del todo el pueblo.
Usando mi magia, empecé a escribir en mi pizarra para responderle con un "No es nada, vosotros me distéis un hogar"
- ¡Je! Eso es lo que más me gusta de ti, lo honesto que eres.
Mentiría si dijera, que eso no consiguió ruborizarme, era algo que no me esperaba.
No tardamos mucho en llegar al puesto de Applejack, una vez estábamos ahí, le ayudé a colocar las manzanas, y a colocar debidamente la pancarta en la que estaba trabajando desde que me mudé.
-Cuando dijiste que tenías talento para el dibujo, no te tiraste un farol. -decía Applejack admirando el trabajo.
Me coloqué detrás del puesto de manzanas, preparando los cestos de manzanas para colocarlas bien.
-Oye Loud, vuelvo enseguida, voy a ir a buscar agua para rociar las manzanas.
Asentí, y empecé a ocuparme del puesto. Al poco tiempo, los clientes empezaron a venir, muchos, ya me conocían y sabían como tratar conmigo, a decir verdad, los Ponys de Poniville eran muy amables, incluso esa alocada cartera, con la cual me llevaba bien.
Los clientes, se fueron sucediendo uno por uno, hasta que finalmente, sólo quedó una Pony de un pelaje extraño, de color marrón y beige y con una espesa melena anaranjada.
-Buenos días, amigo, dime, ¿qué manzanas me recomiendas? -decía aquella Pony.
Empecé a señalarle las que me parecían más grandes y jugosas, pero aquella Pony, se me quedaba mirando extrañada, como si no me entendiera.
-Eh... Perdona, ¿puedes decirme cuales exactamente? -preguntó aquella Pony melenuda.
Un poco asombrado, cogí mi pizarra y le escribí "Ésta", poniéndola sobre las mismas manzanas.
- ¿Te estas quedando conmigo? -me decía enfadada. - ¿¡Por qué cascos no me contestas!?
Justo en ese momento, Applejack volvió y separó a esa Pony del puesto.
-Para el carro, preciosa, ¿se puede saber qué pasa aquí? -preguntó Applejack.
- ¡Éste Pony maleducado, que no me responde como es debido! -se quejaba aquella Pony.
-Primero, ¡éste Pony maleducado, como tu dices, se llama Loud Off! Y segundo, no puede responderte como es debido por que es mudo.
Aquella Pony se sorprendió e inmediatamente se calló.
-Oh... Yo... Lo siento. -intentaba disculparse aquella Pony. -No lo sabía, perdón.
-Um... No sé...
Detuve un momento a Applejack y me puse frente a esa Pony, escribiendo en mi pizarra "no pasa nada, estas cosas pasan"
- ¡Je! Eres muy amable. -contestaba. -Me caes bien. Deja que me presente, me llamo Brave Heart, encantada de conocerte.
Extendió su casco hacia mi, y yo se la choqué, a modo de saludo.
-Me alegro que se haya solucionado todo. -decía Applejack. -Bueno, casi nos hemos quedado sin existencias. Loud, ¿me ayudas a traer más?
Rápidamente, me acerqué al carro y me lo equipé.
-Muchas gracias tesoro. -respondió Applejack.
- ¿Puedo acompañaros? -nos preguntó Brave Heart.
-Claro, pero hay un camino largo hasta Sweet Apple Acres.
-No pasa nada, por el camino podemos hablar.
Ante eso, cogí mi pizarra y respondí "En marcha", y comencé a tirar del carro, seguido tanto de Applejack como de Brave Heart.
Por el camino, estuvimos hablando, al menos ellas dos, yo simplemente les respondía a través de mi pizarra, a medio camino de Sweet Apple Acres, Brave Heart, anduvo junto a Applejack unos pocos metros tras el carro, como si quisiera hablar a solas con ella.
-Dime, Brave Heart, ¿de dónde vienes? No es común ver a muchos Ponys con un pelaje como el tuyo. -le preguntaba Applejack.
-Oh, me mudé a Ponyville hace un año desde Appleloosa. -respondió Brave Heart.
- ¡Vaya! Por ahí tengo familia viviendo, ¿por casualidad conoces a Braeburn? Es mi primo.
- ¡Claro, es un buen amigo mío!
Volteé un segundo la vista echándoles un ojo a las dos, y continué tirando de la carreta. El paseo, estaba siendo muy agradable.
-Oye, y dime Applejack, ¿qué es Loud Off para ti?
- ¿A qué te refieres? Verás, hace unas semanas que llegó a Ponyville, y lo cierto es que cuando llegó fue una locura. -le contestaba Applejack. -Es bueno trabajando y es muy servicial y...
- ¿Te gusta? -dijo Brave Heart.
-Me gus... ¡¿Eh?!
Applejack, se puso roja como las manzanas del campo, mirando a Brave Heart.
- ¡¿A qué viene eso?!
Brave Heart, empezó a reír levemente levemente.
-Tranquila, sólo era una broma
Applejack, hizo algo de pucheros, yo no estaba muy atento de lo que estaban hablando, por primera vez en mucho tiempo, no hacia mucho caso a los sonidos que me rodeaban, sólo a La Paz que había, bueno, la que duró poco, por que enseguida, empezamos a escuchar como un grito lejano, me detuve en seco para ver a mi alrededor.
- ¿Pasa algo, Loud? -me preguntó Applejack.
Como sí directamente se lo dijera, coloqué mi casco a la altura de mi oreja, intentando escuchar más claro, al verme, las chicas me imitaron.
-Suena como... Si alguien gritase... -decía Brave Heart.
-Y... ¡Cada vez se acerca más! -continuó Applejack.
Los tres alzamos la vista al cielo y pudimos ver como algo se aproximaba a gran velocidad hacia nosotros.
- ¡A cubierto! -gritó Applejack.
Applejack y Brave Heart, se hicieron ambas a un lado para ocultarse, pero a mi no me daba tiempo si iba con el carro, así que me lo desenganché y coceé para alejarlo de mí, y no darme tiempo que aquella cosa cayese sobre mí.
El impacto fue impresionante, tal fue, que acabó abriendo un buen boquete en el suelo, y levantando polvo. Cuando el humo se disipó, Applejack y Brave Heart, salieron de sus respectivos escondites para ver que había pasado.
- ¡Loud, ¿estás bien?! -preguntó Applejack corriendo junto a Brave Heart al agujero.
- ¿Estas vivo?
Lo primero que salió del agujero, fue un joven Pony pegaso que portaba unas gafas de piloto.
-Si, estoy bien, gracias por preguntar. -decía aquel pegaso.
- ¡Aparta! -decía Brave Heart coceándolos por la espalda.
Al poco, salí de aquel agujero, despacio, y muy magullado. Las dos, me consiguieron sacar del hoyo.
-Loud, escríbeme, ¿te duele algo? -preguntó Brave Heart.
Aquel Pony pegaso se nos acercó y me miró.
- ¡Caray! Conozco a muchos unicornios, pero jamás había visto a un bicornio. -decía aquel pegaso amarillo.
- ¡Ese chichón, lo has provocado tu, loco! -le respondió Applejack.
Brave Heart, me ayudó a sentarme, para intentar situarme nuevamente, me colocó un par de manzanas frente a mí.
- ¿Cuántas manzanas ves? -me preguntó.
Choqué mis cascos entre ellos, hasta que sonaron cuatro veces, pero aún así, me tambaleaba.
-Casi, sólo habían dos manzanas. -respondió Brave Heart. -Applejack, no creo que Loud Off esté para llevar el carro.
Al oírlo, Applejack se acercó a nosotros.
-Menos mal que guardó un botiquín en el carro. -respondía. - ¡En cuanto a ti, señorito, tirarás del carro hasta Sweet Apple Acres!
- ¿Quién, yo? -preguntó el pegaso.
- ¡Tu acabas de noquear a mi amigo, así que tendrás que acerté responsable!
Resignado, aquel pegaso fue llevado al carro, enganchándose a él, Applejack me subió a este y empezó a tratarme las heridas con pomadas y vendas, mientras que Brave Heart vigilaba a aquel pegaso.
-Sabes que puedo seguir sin que me vigiles, ¿verdad? -dijo aquel pegaso.
-Si piensas que te voy a dejar sólo, vas listo. -le respondió Brave Heart.
-En fin, al menos me presentaré, me llamo Dust Typhoon. -dijo aquel pegaso, presentándose.
-Ya... Como sí me importase mucho, después de haberte estrellado sobre mi amigo. -decía insolente Brave Heart.
-Bueno, al menos podrías ser más educada. -quejaba Dust.
Applejack, finalmente, acabó por vendarme en la pata derecha.
-Bueno, ya está, que duro eres, mira que aguantar ese impacto y sólo acabar magullado...
Como pude, usé mi pizarra para escribirle, lo que realmente sentía, "Ay..."
-Oh, vamos tesoro, no ha sido nada.
La miré un poco serio, pero con una leve sonrisa dibujada en mi rostro. Ya no tardamos en llegar a Sweet Apple Acres, donde finalmente, Dust Typhoon se detuvo exhausto, cayendo al suelo.
-Por fin... -decía respirando constantemente.
Me bajé del carro junto a Applejack, quitándole el arnés a Dust Typhoon.
-Gracias, amigo, las alas se me estaban empezando a entumecer.
Alcé mi pizarra, y le scribí en ella "No es nada". Se me quedó mirando un rato, igual que todos. En eso, Brave Heart se acercó y dijo:
-Mi amigo es mudo.
-Ah, entiendo.
Dust, se levantó como pudo, alzando su casco hacia mi.
-Me llamo Dust Typhoon, encantado de conocerte.
Choqué mi casco con él, a modo de saludo, e intercambiamos una sonrisa.
-Te llamabas Loud Off, ¿verdad?
Asentí a la vez que separábamos los cascos.
-Ya me han dicho que eres mudo, ¿no te resulta complicado que te entiendan?
Ante ese comentario, hice uso de mi pizarra, y le respondí: "Cuando me conocen, no es tan difícil".
-Ya entiendo. Oye, ¿quieres qué nos conozcamos los tres un poco mejor? Tú, la pequeña y yo.
- ¡¿A quién llamas pequeña, larguirucho?!
No sabía que hacer, realmente vine a recoger más manzanas para el puesto.
-Ve con ellos Loud, le pediré a Big Mac que me eche un caso, tu ve con ellos y descansa un poco. -me decía Applejack.
Le di un pequeño abrazo, y acepté la invitación de Dust.
-Genial, vayamos al bosque Ever Free. -dijo Dust Typhoon.
- ¡Suena genial! -exclamaba Brave Heart.
-Tened cuidado.
Nos alejamos poco a poco de Sweet Apple Acres, intentando conocernos mejor, cada cual a su manera, yo escuchaba, y respondí escribiendo en mi pizarra, y a veces, yo les preguntaba a través de ella. Una de ellas fue: "¿A qué os dedicáis?"
-Yo estoy trabajando en la floristería Rose a tiempo parcial, pero me gustaría ser la primera Pony terrestre en entrar dentro de la guardia real. -respondía Brave Heart.
-Yo soy acróbata aéreo en Clouds Dale, pero me gustaría ser...
-Espera, no me lo digas, un Wonderbolt, ¿verdad? -interrumpía Brave Heart.
- ¿Qué? ¡No! Yo quiero ser un pegaso de rescate.
Eso nos pilló por sorpresa. Inmediatamente, pregunté por mi pizarra: "¿Pegaso de rescate?"
-Si, como mi abuelo, un pegaso de rescate son los pegasos que se encargan de las misiones de salvamento para las zonas inaccesibles al resto de Ponys. -explicaba Dust.
-Suena interesante, eres uno de los pocos pegasos que conozco que no optan por ser un Wonderbolt. -admiraba Brave Heart.
- ¿Y tú, Loud? ¿A qué aspiras? -me preguntó Dust.
Empecé a escribir en la pizarra mientras andábamos. Al terminar, se los mostré a ambos.
-"Quiero ser un buen ilustrador" -leían ambos.
- ¡Oye! Eso es genial. -admiraba Dust. -No conozco a muchos Ponys cuyo talento sea el dibujo.
Brave Heart, se adelantó un poco en el bosque, hasta que halló una cueva.
- ¡Eh, chicos! ¿Por qué no investigamos esta cueva?
Dust y yo, nos miramos.
- ¿En serio crees que será seguro? -preguntó Dust.
-Vamos, no seáis cobardes, ¡el último es un huevo de fénix podrido!
Dicho eso, Brave Heart se adentró en la cueva.
- ¿Vamos?
Asentí, usando mi magia para iluminar el cuerno de mi cabeza, a modo de farolillo, iluminando el interior de la cueva. No tardamos en toparnos con Brave Heart en el interior de la cueva.
-Ya era hora, tortugas, me estaban saliendo canas de estar esperando. -quejaba la joven Pony.
-Oye, algunos queremos permanecer enteros. -contestaba Dust.
Ante eso, le miré algo enfadado, haciéndole recordar las melladuras que me provocó, al darse cuenta, simplemente rió leve apartando la mirada.
-Como sea... Vamos a seguir investigando.
Brave Heart, dio un par de pasos al frente, y de pronto, desapareció frente a nosotros, dando un leve gritillo.
- ¡Brave Heart! -gritó Dust.
Los dos, nos acercamos un poco a donde desapareció, y, gracias a la luz de mi cuerno, pudimos ver que se había caído por un hoyo, aguantándose con los cascos a las paredes del agujero.
- ¿Estás bien? -preguntó Dust.
- ¿A ti te parece que esté bien? ¡Sacadme de aquí, por favor! -respondía Brave Heart.
-Bueno... Ya que me lo pides con educación... -decía burlón Dust Typhoon. -Loud, ilumíname, ¿vale?
Asentí, e iluminé más mi cuerno, proporcionando más luz. Dust, se elevó levemente del suelo, y empezó a descender por el hoyo hasta que se encontró encima de Brave Heart, pasando sus cascos bajo los de ella.
-Ahora, cuando te diga "ya", te sueltas, ¿vale? Yo te agarro.
-No sé si fiarme. -dijo Brave Heart.
-Confía en mi. -le contestó Dust.
Brave Heart, calló de inmediato, tomó aire y asintió.
- ¿Preparada? Suéltate.
Brave Heart, se soltó de las paredes, y Dust pudo cogerla, elevándola fuera del hoyo.
-Oye, para lo pequeña que eres, apenas pesas. -le dijo Dust.
-No sé si cocearte por ello, o sentirme halagada. -contestaba Brave Heart.
Dust la bajó poco a poco al suelo por delante del hoyo, yo, me reuní con ellos rodeándolo, y le pregunté por la pizarra: "¿Estás bien?"
-Si... Gracias a Dust.
Brave Heart, se le acercó, golpeando suavemente el pectoral de Dust Typhoon.
-Gracias Dust, te juzgaba mal, eres un gran Pony de rescate.
- ¡Je! No ha sido nada.
Sonreí frente a ellos, ya que por fin, parecía que la amistad florecía en ellos.
-Venga, sigamos investigando la cueva, seguro que algo encontramos. -continuó Brave Heart.
La volvimos a seguir, iluminando algo más mi cuerno, pues cada vez se veía menos, y la humedad se hacía notar, oyéndose el goteo en la cueva, lo cual, me ponía los pelos de punta.
- ¡Brrrr! Qué frío. -quejaba Dust.
-No seas flojo, ¿y tu quieres ser un pegaso de rescate? -decía Brave Heart.
De pronto, se escuchó un ruido como metálico golpeando las rocas del fondo, y una luz fugaz corrió delante de nosotros de un lado a otro.
-Qué... ¿Qué ha sido eso? -preguntó Brave Heart.
-Eso mismo me preguntó yo. -respondía Dust.
Intenté ver mejor el fondo de la cueva, pero cuando quise darme cuenta, Dust y Brave, se ocultaron tras de mi. Asombrado, usé mi pizarra, preguntándoles: "¿Qué estáis haciendo?"
-Bueno... Eres el único que puede usar magia, ante lo que surja podemos contar contigo.
Volví a escribir un "Ya....", en la pizarra, y caminé al frente despacio. Aquella luz, se repitió varias veces, era una luz rosada, parecido a un fuego fatuo.
- ¿Qué diablos será eso? -decía Dust.
-Cómo si lo supiéramos. -contestó Brave Heart.
De pronto, aquella luz se nos empezó a acercar, los tres, nos juntamos mucho, pues no sabíamos de que podría tratarse, poco a poco, se empezó a escuchar un sonido de cascos aproximándose, lo cual, nos tranquilizó.
Poco a poco, se pudo apreciar la silueta tras aquella luz, era una Pony de pelaje Esmeralda muy pálido, las crines rosadas y los ojos de intenso esmeralda, con cinco simpáticas pecas entre sus ojos.
- ¿Quiénes sois vosotros? -nos preguntó iluminándonos con la luz con el farol de su casco.
-Sólo hemos venido a explorar la cueva por nuestra cuenta. -explicaba Brave Heart, tapándose, para evitar ser cegada por la intensa luz.
- ¿Por vuestra cuenta? ¿Es que estáis locos? -volvió a preguntarnos. - ¿Acaso tenéis alguna experiencia en espeleología?
Le respondí usando mi pizarra: "No"
-Lo suponía. -dijo aquella Pony. -Seguidme, os sacaré de aquí.
Comenzó a andar, empezando a guiarnos hacia la salida.
- ¿Y cómo es que se os ha ocurrido meternos en esta cueva? -preguntaba aquella Pony. -A todo esto, me llamo Ruby Spark.
-Dust Typhoon.
-Brave Heart.
Yo le respondí con la pizarra: "Loud Off"
-Encantado, pero contesta da mi pregunta.
-En realidad... Les reté a que nos metiéramos dentro para explorarla. -explicó Brave Heart.
-Mirad, no soy quien para echaros la bronca, pero es peligroso meternos en cuevas sin el equipo adecuado. -decía Ruby. - ¿Qué habría pasado sí os hubierais caído por uno agujero?
Los tres, nos miramos.
-Es gracioso que nos lo menciones. -dijo Dust.
-Os habéis caído en el agujero de la entrada, ¿verdad?
Los dos, señalamos a Brave Heart.
-Gracias chicos. -dijo irónicamente la pequeña potrilla.
Ruby, suspiró.
-En fin, venid conmigo os...
De pronto, empezó a escucharse una serie de temblores.
- ¿Qué ha sido eso? -preguntó Dust.
-Un seísmo. -contestó Ruby. -Creo que he picado más de lo que debía.
Las estalactitas empezaron a temblar, agitándose fuertemente, nervioso por lo que pudiera pasarles a todos, empecé a concentrar mi magia en el cuerno.
- ¡Se nos va a caer el techo encima! -gritaba Brave Heart.
Las estalactitas, empezaron a precipitarse sobre nosotros, pero a escasos metros de que cayeran sobre nosotros, se pudo escuchar el ruido de las rocas destrozándose sobre nosotros, pero ninguna cayó sobre nosotros.
El resto de Ponys, se quedaron viendo encima de sus cabezas, como una especie de escudo los cubría y salía de mi cuerno, protegiéndolos a todos.
-Loud, ¿pero cómo...? -decía Dust impresionado.
- ¡Las preguntas luego, salid corriendo! -declaró Ruby.
Todos, salimos corriendo, siguiendo a Ruby Spark, realmente, ella sabía lo que se hacía, nos guiaba por toda la cueva. No tardamos mucho hasta que por fin pudimos divisar la salida, no paramos bajo ningún concepto, pero entonces, cuando pisé con mis patas delanteras, caí en el agujero que estaba casi en la entrada, cayendo yo en ella.
- ¡Loud! -Gritaron todos al ver que caía dentro del agujero.
No les dio tiempo, ya que la cueva se cernió, tapando la entrada.
- ¡Oh, no, Loud! -gritaba Brave Heart.
- ¡Tenemos que sacarle de ahí! -decía Ruby, acercándose a las rocas y empezando a cocearlas, para apartarlas.
Todos empezaron a trabajar para sacarme de ahí.
Mientras, yo, me empecé a despertar tras la tremenda caída, sintiéndome algo más magullado.
- ¿Dónde estoy? -me preguntaba a mí mismo.
Intenté iluminar mi cuerno con mi magia, pero estaba tan mellado que a penas tenía energías para poder usar la magia, ni siquiera mi magia de materialización. Me empecé a sentir abrumado, estando tanto tiempo en un sitio oscuro, sin poder oír nada, era desolador, sentía como el corazón se me encogía de la angustia.
Me encogí sobre mi propio cuerpo, haciéndome un ovillo, para sentirme mejor. A los pocos minutos, empecé a escuchar un sonido de coces, provenir sobre mi cabeza, y poco a poco, la tenue luz, empezó a iluminar mi oscuro recinto, escuchando las voces de Ruby, Brave Heart y Dust.
- ¡Loud, si estas bien, da dos coces en el suelo! -gritaba Brave Heart en el agujero.
La escuché, con el corazón a rebosar de felicidad, dando dos golpes en el suelo.
-Está bien, menos mal. -decía aliviada Brave Heart.
-Yo bajaré a recogerlo. -decía Dust preparando el vuelo.
-No, espera. -decía Ruby deteniéndolo. -Ahí abajo no podrás ver nada, si te pasara algo sería peor, yo bajaré.
Tras declarar aquello, Ruby sacó de sus alforjas una soga, la cual, amarró a una roca, atándose el otro extremo alrededor de su cuerpo.
-Tomad el resto, yo bajaré y le ayudaré. -decía dándole el resto de la cuerda a Dust y Brave Heart. -Bajadme con cuidado, no sabemos lo que puede pasar.
-Entendido. -respondió Dust. -Sacaremos de aquí a nuestro amigo
Ruby, empezó a descender, encendiendo su casco, descendiendo despacio con la ayuda de Dust y Brave Heart. Poco a poco, veía como Ruby descendía, hasta que por fin tocó el suelo con sus cascos.
-Ahora, Loud, ayúdame a ayudarte. -me decía gentilmente.
Yo, asentí, y me levanté lo que pude, facilitándole pasar la soga alrededor de mi cuerpo, atándome con ella. Tras ello, se subió sobre mi grupa, y tiro de la cuerda, señal para que Dust y Brave Heart tirasen.
-Ahora. -decía Dust, empezando a tirar.
Poco a poco, empezamos a elevarnos del suelo, comenzando a subir.
- ¡Chicos, tened cuidado de no rozar mucho la cuerda contra las rocas! -declaraba Ruby.
- ¡Entendido! -decía Dust, evitándolo a toda costa.
Poco a poco, estábamos alcanzando el final del hoyo, la luz, se hacía más visible. Finalmente, consiguieron sacarme del agujero, dejándome despacio fuera de la cueva.
-Gran trabajo, chicos. -decía Ruby desatándome y quitándose el casco.
Grande fue nuestra sorpresa al comprobar que era una unicornio.
-Vaya, eres una unicornio. -decía Dust.
Me incorporé al darme cuenta.
-Por supuesto, ¿con qué crees que hacia luz? -respondió Ruby. -Pero esa no es la cuestión.
Tras aclarar aquello, se me acercó, tratándome las heridas.
-Has tenido mucha suerte, espero que no repitas esto más. -me decía. -Ahora dinos, ¿qué es esa magia que usaste?
Haciendo uso de mi pizarra, empecé a explicarles que se trataba de una magia que me enseñó mi abuelo, llamada magia de materialización.
-Vaya, entiendo como pudiste hacer ese escudo, muy hábil. -admiraba Ruby.
-Buf... La verdad es que ha sido un día de locos. -decía Dust algo agotado.
-Pues yo creo que ha sido un buen día. -dijo Brave Heart.
Todos la miramos durante un momento a Brave Heart, no teníamos realmente idea de lo que quería decir.
-Hoy he conocido a cuatro Ponys a los que puedo considerar mis mejores amigos.
Lo que dijo, nos tomó por sorpresa, y nos miramos mutuamente, compartiendo sonrisas, en eso, cogí mi pizarra, y escribí "Los mejores amigos, para siempre"
-Los mejores amigos, para siempre. -dijeron los demás al unísono, compartiendo risas y yo, una sonrisa.
Tras reponernos, me acompañaron hasta Sweet Apple Acres, justo antes del anochecer, ahí, la abuelita Smith, nos recibió.
-Por todos los manzanos, Loud, ¿Qué te ha pasado? -me preguntó.
-Yo le diré que le ha pasado, señora. -interrumpió Ruby. -Que tienen ustedes un huésped muy valioso, y un gran amigo.
-El mejor. -continuó Dust.
-E irremplazable. -terminaba Brave Heart.
No pude evitar darles un abrazo grupal, mostrando todos una sonrisa, digna de una fotografía.
Al día siguiente, y tras terminar con mis quehaceres, fui corriendo a Ponyville para encontrarme con mis nuevos amigos, con quienes compartía mi nueva vida en este mágico lugar. Si algo me enseñó mi aventura en aquella aventura en la cueva del bosque Ever Free, es que nuestra amistad, había sido forjada por el corazón, la la luz, la ilusión, y la unidad, bases, que en el futuro, intentaríamos recordar.
-Hola Loud, ¿qué tal hoy en la granja? -me preguntó Brave Heart al llegar al lugar.
Yo le respondí escribiéndole: "Genial", y comenzamos a pasear todos por Ponyville. Esta aventura, me había enseñado que había algo aquí, y en mi grupo de amigos, que no podía dejar escapar, esa magia que nos había unido, bajo el nombre de "Los mejores amigos, para siempre", también pudiendo llamarlo "La magia de la amistad"
