Me ha llevado todo el día escribir el siguiente capítulo, pensando cosas que podían ser buenas, y dándoles otro giro, no estoy muy convencido, pero me gusta como me ha quedado el final, espero que a vosotros también.
Gracias a todos por los ánimos que me estáis depositando, a veces, tengo la sensación de que el capítulo no está bien, pero si a vosotros os gusta, es todo cuanto necesito, y sin más dilación, os dejo el nuevo capítulo
P.D.: Estoy deseando llegar al capítulo 7, la idea que tengo es la bomba
Fin de semanaHace unos días, Applejack, me informó de un concurso de talentos que se iba a celebrar en Ponyville, y que el primer premio de este, era un jugoso premio, que podría ayudarnos a tapar algunos pequeños agujeros. Sin pensarlo mucho, y por ellos, me inscribí, y durante los días siguientes, empecé a trabajar en una buena ilustración.
Tras entregarla, y tras días de esperas, por fin iban a dar los resultados del concurso, yo, había acudido con mis amigos a la entrega, expectante por el resultado y por ver si habría o no ganado
-No pensé que te fueras a presentar. -dijo Ruby. -Quiero decir... Siempre estas ocupado en la granja o el mercado, y apenas sacas tiempo para ti.
-No le atosigues, Ruby. -le dijo Dust. -Nosotros estamos aquí para apoyarle, ¿o no?
Asentí, pero la verdad es... Que estaba bastante nervioso, Applejack contaba conmigo para conseguir más ayuda en la granja, y por mi morro que lo iba a conseguir.
Entonces, empezaron a sonar los timbales, y la alcaldesa, se puso frente a todos en el escenario,a punto de anunciar a los tres ganadores.
-Buenos días, yeguas y caballos. -declaraba la alcaldesa. -Nos hemos reunido hoy aquí, para dar los resultados del concurso de talentos.
Tras eso, la alcaldesa se aclaró la garganta.
- ¡Oh, venga! No nos tenga en ascuas. -dijo Brave Heart impaciente.
-Muy bien, el tercer premio, consiste en un cuadro firmado por Colour Potranco. -decía la alcaldesa. -Y el premio es para... Carrot Top por su escultura de zanahorias.
Los Ponys, vitorearon a Carrot Top, mientras esta subía orgullosa al escenario.
- ¿En serio, una escultura de zanahorias? -decía Dust, incrédulo.
-Los jueces no deben de tener gusto artístico. -comentaba Ruby.
La alcaldesa, volvió a aclararse la garganta.
-El segundo premio, consiste en un fin de semana en Canterlot para dos Ponys, con todos los lujos pagados. -declaraba nuevamente la alcaldesa. -Y el ganador es...
El silencio se hizo presente, sólo roto por el vibrar del timbal.
- ¡Loud Off, con su ilustración "Tarde en Sweet Apple Acres"!
Los jueces, destaparon mi ilustración, la cual, mostraba los campos de manzanas de la familia Apple durante uno de esos hermosos atardeceres, cuando las manzanas brillan con los últimos rayos del día. Muchos de los que estaban presentes, se quedaron maravillados viéndolo, y algunos se quejaban de que estuviera en un segundo puesto.
-Bueno, ve a por él, Loud, al menos, te lo has ganado. -decía Ruby sonriendo.
Un poco decepcionado, me aproximé al escenario, y una vez sobre él, la alcaldesa me hizo entrega del sobre con los billetes. Muchos del público, me animaban con vítores, chocando sus cascos entre ellos, los miré, bastante sorprendido, no esperaba aquella reacción.
La alcaldesa, me estrechó el casco.
-Sinceramente, pienso que debiste de ganar. -me respondió la alcaldesa. -Sigue así, Loud.
Me alegré ante su comentario, y bajé del escenario, reuniéndome de nuevo con mis amigos.
-Bueno, ya que te lo has ganado...
-Y el primer premio, es para los Cake por su magnánima muffin de arándanos y frambuesas. -declaraba la alcaldesa.
Todos, miramos hacia los jueces, y creíamos entender el por qué, Derpy, estaba entre ellos.
-Ahora todo tiene sentido. -declaró Dust.
Tras terminar el concurso, di una vuelta con mis amigos por Ponyville, y tras un detenernos en el restaurante, abrí el sobre.
-A ver, déjame leer. -decía Ruby tomando el folleto. -"Estas invitaciones le dan pase a las siguientes actividades: hospedaje en el hotel Gold Hooves de Canterlot, con derecho a SPA, entradas para El potrofantasma de la ópera, cena en el restaurante Magical Hat, derby de los Wonderbolts y pase libre a los jardines de palacio".
-Vaya, sería un finde muy completo. -admiraba Brave Heart.
Al escucharles, usé mi pizarra para preguntarle a Dust, si el quería venir conmigo.
-Lo siento Loud, pero las pruebas de acceso a Pegasos de Rescate empezaran pronto, y debo entrenar para ello. -me respondió. -Debo aproximarme a la velocidad de Spit Fire, si quiero aprobar.
Dirigí la pregunta esta vez a Brave Heart.
-Ya quisiera, pero la semana que viene hay una boda, y ya sabes, hay que preparar las flores y toda la parafernalia, a mí tampoco me hace ninguna gracia. -me respondió. -Sabes que es un trabajo temporal.
Miré luego a Ruby, con las mismas intenciones.
-Lo siento, me ha surgido un trabajo de excavación cerca de Fillydelphia, y debo ir para valorar las joyas que encontremos. -respondió Ruby.
Me quedé mirando las entradas mientras nos traían las hamburguesas de avena.
-Pero seguro que encontrarás a alguien que te acompañe. -continuó Ruby. -Digo, ¿por qué no preguntas a Rarity o a Rainbow Dash, seguro que ellas estarían encantadas de ir a Canterlot.
No supe que decir, simplemente golpeé con la tiza la pizarra un par de veces, y empecé a comerme la hamburguesa mientras miraba los billetes. Durante el tiempo que estuvimos en el restaurante, me estuvieron animando a que pasase bien el fin de semana allá en Canterlot, y cuando nos separamos, anduve un poco distraído, intentando pensar qué hacer con el billete que me sobraba.
Al poco, tropecé con Rarity, algunas de sus telas, empezaron a volar por el pequeño impacto, y, con un poco de suerte, usé mi magia para evitar que cayesen y se echasen a perder.
-Gracias Loud, si no hubiera sido por ti, adiós a mis telas. -me dijo.
Yo, usé mi pizarra para decirle: "La culpa es mía, por no ver por donde iba"
-Oh, no digas tonterías.
Entonces, el folleto y los billetes cayeron de mi maleta, me intenté recoger ambos, pero entonces, Rarity, curioso, tomó el folleto, y lo leyó. Su rostro lo decía todo, el entusiasmo que le produjo, fue indescriptible.
- ¡¿Has ganado un fin de semana de lujo en Canterlot?! -decía dirigiendo su mirada sobre mí. - ¡¿Cuándo pensabas decirlo?! Me encantaría ir, todo ese esplendor y glamour... Simplemente, ah...
Por el entusiasmo, Rarity casi se desmaya, así pues, usé mi magia para materializar un gran cojín para acomodarla. En eso, tanto Pinkie como Fluttershy aparecieron.
- ¿Qué ha pasado? -preguntó Fluttershy.
- ¡Oh, oh! ¿Es un juego? ¿Puedo jugar? -decía entusiasmada Pinkie, tirándose sobre Rarity.
Esto último, provocó que el folleto que sostenía ella, saliera volando, intenté alcanzarlo, pero cayó sobre la nariz de Fluttershy.
- "¡Oh, no!" -pensé para mí.
Fluttershy, leyó el folleto detenidamente, sus ojos, se volvieron enormes, mirando con interés.
- ¡Oh, esto es genial! -exclamaba. -Loud, ¿me podrías llevar contigo? Hace tiempo que quiero volver a los jardines de Canterlot, digo... Si no te importa.
- ¡Espera un momento Fluttershy! -decía Rarity, saliendo de debajo de Pinkie Pie. -Loud me llevará a mí a Canterlot, ¿verdad?
Miré a ambas con sorpresa, así pues, cogí el folleto y salí corriendo.
- ¡Espera! -decían ambas corriendo hacia mí.
- ¡Esperadme! -decía Pinkie Pie dando saltitos, alegre.
Me oculté entre dos edificios, dándole esquinazo a Rarity y Fluttershy, y hasta a Pinkie quienes seguían buscándome.
Cuando creí que las había perdido, salí de mi escondite, esperando no encontrarme con ellas. Entonces, Rainbow, me dio un susto por la espalda, con una nube de tormenta.
- ¡Jajaja! Lo siento Loud, pero me lo pusiste a tiro. -decía ella.
El folleto, salió por los aires, cayendo sobre la nube en la que posaba Rainbow.
- ¿Qué es esto?
Rainbow, como si de una broma del destino se tratase, comenzó a leerlo, los ojos, se le iluminaron como pasó con los rostros de Rarity y Fluttershy, ya entendía lo que iba a pasar.
- ¡Qué suerte Loud! Oye, ¿me llevarás para ir a ver el derby de los Wonderbolts? Todo lo demás me da igual, pero el derby... ¡Madre mía, madre mía, madre mía! ¡Necesito ir!
Ante el escándalo que realizaba Rainbow Dash, Rarity, Fluttershy, y Pinkie Pie, nos encontraron.
- ¡Alto ahí, Rainbow Dash! -decía Rarity. -Loud me va a llevar a mi a Canterlot, ¿verdad?
-Espera un momento, Rarity... Loud me acompañará a los jardines de palacio, ¿a qué si? -me preguntaba Fluttershy, clavándole una mirada tímida.
- ¡De eso nada, Loud me llevará a ver el derby de los Wonderbolts! -decía Dash, interponiéndose entre los dos.
No tenía idea de lo que estaba pasando, ¿en qué momento me había vuelto tan popular entre ellas? ¿Tan bueno era ese fin de semana en Canterlot? Las tres, clavaron sus miradas en mi, esperando una respuesta, mientras que, Pinkie Pie, no dejaba de hacer la mona, jugando.
- ¿A quién vas a llevar, Loud? -me preguntaron las tres.
Miré a las tres, bastante sorprendido, y sintiéndome acorralado, ante esa situación, sólo deseaba salir corriendo.
-Loud, no sé qué pasa, pero corre. -me susurraba Pinkie Pie.
Esa era toda la motivación que necesitaba. Recogí el folleto, y salí corriendo, intentando escapar de las tres, hacia Sweet Apple Acres. Pero no iba a ser fácil, más por Rainbow, que me pisaba los talones.
- ¡Alto, Loud! -gritaba queriendo que me detuviese.
No le hice caso, así que seguí corriendo, antes de que me alcanzasen, en una de esas, Rainbow se lanzó para intentar pararme, pero para evitarlo, materialicé un trampolín elástico, lo cual, le provocó un rebote varios metros por el impulso que llevaba.
Rarity, empezó a usar su magia para detenerme, pero yo usaba la mía, para impedirlo. Ya me estaba empezando a cansar de correr, pero ellas seguían, como posesas. Cuando llegué a Sweet Apple Acres, intenté meterme dentro del granero, pero entre Rainbow, que cerró la puerta de golpe, y Rarity, que me sujetó de la cola con su magia, me lo impedían.
- ¡¿A quién vas a llevar?! -me preguntaron las tres a la vez.
Retrocedí un poco como pude, arrastrando mi lomo sobre el suelo. Entonces, las puertas del granero se abrieron, saliendo Applejack, y al verlas ahí, se sorprendió.
- ¡¿Se puede saber que pasa aquí?! -preguntó.
Fue la oportunidad perfecta, sin pensarlo mucho, y evitar peleas entre las tres, le entregué el billete y el folleto a Applejack. Asombrada, ella los tomó, y leyó el folleto. Anonadada, me miró.
- ¿Y esto, Loud?
Rápidamente, usé mi pizarra para explicarle: "Es el segundo premio del concurso de talentos que me dijiste, y como fuiste la primera que me animó a participar... Quiero que me acompañes tu a Canterlot"
- ¡¿Qué?! -dijeron las tres a la vez, sorprendidas.
-Va... Vaya, Loud... No sé qué decir. -decía Applejack sin saber que responder.
Rápidamente, volví a escribir en mi pizarra, colocándola frente a ella: "Por favor, di que sí, si no, ellas se pelearan por el billete". Entendiéndome, Applejack asintió.
-De acuerdo, vayamos a Canterlot, será divertido. -dijo.
Las otras tres, se decepcionaron bastante, a excepción de Fluttershy, que lo hizo tímidamente.
Cuando llegó el viernes, Applejack y yo, nos fuimos a la estación para irnos a Canterlot a disfrutar del premio que gané, lo que no sabía, es que tres Ponys, nos vigilaban escondidas de nuestra vista.
-Estos dos no se van a librar de nosotras fácilmente. -decía Rainbow Dash, ocultándose junto a Fluttershy y Rarity.
-Nos hemos quedado sin el viaje de lujo, y si Loud Off ha invitado a Applejack, es que los dos tienen algo que ocultarnos.
-Pero chicas... Era el premio de Loud... Creo que está en su derecho de a quién invitar. -les decía Fluttershy.
-Creo que no lo entiendes, Fluttershy. -le dijo Rainbow. -Pensadlo, Loud y Applejack viven y trabajan juntos, lo más normal es que entre ellos dos haya surgido algo más que amistad.
-No querrás decires que... -decía Rarity.
-Exacto, que esos dos son novios. -terminaba Rainbow.
Las dos, se quedaron asombradas.
-Pero... ¿Eso no sería bueno? -preguntó Fluttershy.
-Me da igual, vamos a vigilar a esos dos.
Nos subimos al tren, justo a tiempo, pero las chicas, no se quedaron atrás, y compraron rápidamente los billetes, subiéndose a toda prisa.
Gracias a los billetes, teníamos un recinto especial, sólo para nosotros dos, pero las chicas, se tenían que conformar en ir en otro vagón, sentadas en las bancas.
-No es justo, ellos viajando en un lujoso vagón, y nosotras aquí, apretujadas con los demás. -quejaba Rarity.
-Es parte de su premio, no podemos quejarnos. -le decía Fluttershy. -Además, técnicamente, no tendríamos que estar aquí, siguiéndoles. -añadió
-No pasa nada, pero en cuanto lleguemos a Canterlot, debemos pasar desapercibidas, para evitar que nos descubran. -les decía Rainbow.
Tras un par de horas, el tren se detuvo al final en la estación de Canterlot, una vez ahí, Applejack y yo, bajamos con las maletas, fuera, vimos a un Pony con el cartel del hotel Gold Hooves, con mi nombre en él, así pues, nos acercamos.
-El señor Loud Off, supongo. -me dijo aquel Pony.
Ante ello, usé mi pizarra para contestarle: "Exacto".
-Síganme, su taxi les espera.
Empezamos a seguirle, fuera de la estación, en eso, las chicas nos seguían de cerca, ocultándose de nuestra vista. Cuando subimos al taxi que nos llevaría al hotel, las chicas cogieron rápidamente el posterior al nuestro.
- ¡Siga a ese taxi! -le decía Rainbow al taxista.
Durante el camino, admiraba apasionado a mi alrededor, nunca había estado en Canterlot, y empezaba a entender, por qué Rarity quería venir, era cierto que era elegante, pero a la vez, impresionante.
-Se nota que es la primera vez que vienes, ¿verdad? -me preguntó Applejack.
Asentí un par de veces, lo cierto, es que estaba entusiasmado.
-Sé que me diste ese billete para evitar una pelea entre las tres, pero Loud, ¿por qué no invitaste a alguna de las otras? -me preguntó.
No supe que responderle, pero opté por la respuesta más obvia: "Ya que tú me animaste, no me pareció justo no hacerlo".
Applejack, esbozó una simple sonrisa al ver mi respuesta. En seguida, llegamos al hotel Gold Hooves, era un lujoso y gran hotel, que se alzaba varios pisos. Al entrar al hall, el botones nos recibió con una agradable sonrisa, llevando nuestro equipaje.
Al poco, las chicas llegaron, observándonos de lejos en el Hall, y perdiéndonos de vista en el ascensor.
- ¡Esperadme, que ahora vuelvo! -decía Rainbow.
Rainbow, subió volando las escaleras, hasta el décimo piso, donde nos vio, guiados por el botones, cuando vio el número de habitación, volvió al Hall, reuniéndose con Fluttershy y Rarity.
-Están en el décimo piso, en la habitación 2101. -les dijo.
-Bien, pediremos una de las habitaciones de al lado. -decía Rarity. -Así los mantendremos vigilados.
De pronto, oyeron el ascensor llegar al hall, en eso, se escondieron, y salimos de él.
-Bueno, ¿dónde vamos primero Loud? -me preguntó mientras salíamos del hotel.
Las chicas, se asomaban despacio entre los muebles y plantas del hotel, acabamos saliendo, y caminando por la calle, quería que Applejack, que ya conocía parte de Canterlot, me diera un tour.
-Chicas... Creo que deberíamos dejarlo. -les decía Fluttershy.
-Ya es tarde para eso. -le contestó Rarity.
-Venga, sigámosles. -continuaba Rainbow.
Applejack y yo, estuvimos paseando hasta que por fin llegamos al recinto donde se iba a celebrar el derby de los Wonderbolts, sin saber, que éramos seguidos por las chicas.
- ¡¿El primer día y ya van al derby?! Loud sabe lo que se hace. -exclamaba Rainbow Dash. -Tenía que haberme invitado a mí.
-Deja de quejarte, y paga las entradas para seguirles. -le dijo Rarity.
- ¿Pagar? ¿Quién necesita pagar cuando se tiene de estas? -le respondía Rainbow agitando sus alas.
Emprendió el vuelo, colocándose sobre una nube encima del recinto. Enfurruñada, Rarity pagó su entrada y la de Fluttershy.
-Anda, vamos, Fluttershy. -le dijo.
Ya en el interior del recinto, esperé con entusiasmo el inicio del derby.
-Tranquilo Loud, ni que fueras Rainbow.
Para responderle, usé mi pizarra, diciéndole: "Es mi primera vez en un derby de los Wonderbolts, estoy muy entusiasmado"
- ¡Je! Te entiendo, te entiendo. -me respondía, colocando su casco sobre mi lomo.
El derby, comenzaba, mientras Applejack y yo admirábamos desde nuestros asientos, Rarity y Fluttershy nos observaban desde desde las últimas filas, y Rainbow desde la nube, más pendiente al derby que en nosotros.
- ¡Eso es Spit Fire, sigue así! -decía emocionada.
- ¡Señorita, ¿qué hace aquí?! -le decía un pegaso de seguridad.
Sorprendida Rainbow titubeó un poco, y salió volando, para evitar que el guardia la pillase.
- ¡Alto! -le decía el guardia.
Tras hora y media, el derby acabó, y Applejack y yo, continuamos el paseo, intentando hacer tiempo hasta el siguiente evento. Tras salir nosotros, Rarity y Fluttershy salieron del recinto.
- ¿Y dónde estará Rainbow? -preguntó Rarity.
Al poco, Rainbow apareció un poco hecha polvo.
- ¿Qué ha pasado? -le preguntó Fluttershy.
-Ah... Nada importante -rió nerviosa. -Solamente un guardia, que me pilló. -les explicó. -Venga, sigámosles.
Durante el paseo para ir al musical del Fantaspotro de la ópera, Applejack y yo, anduvimos por el parque de Canterlot, no, sin ser seguidos de las chicas.
- ¿Pero estos no van a parar? -preguntó Rainbow algo molesta.
-Si te sigues quejando, nos van a pillar. -le decía Rarity.
-Yo... Creo que deberíamos dejarlos en paz. -insistió Fluttershy.
-Ya es tarde para echarnos atrás, sólo nos queda continuar. -le respondió nuevamente Rainbow Dash.
Anduvimos cerca de la fuente, cuyo suelo estaba bastante húmedo, en eso, Applejack se resbaló, al verla, me interpuse para que no cayese, poniéndome entre ella y el suelo. Esto, fue malinterpretado por las chicas, que seguían espiándonos.
- ¡Santa Celestia! -decía Rarity asombrada.
-Yo no miro... -decía Fluttershy tapándose los ojos con las alas.
- ¡Alá, Loud, que atrevido! -decía Rainbow.
Cuando Applejack volvió en sí, se percató que estaba sobre mí, a lo cual, se apartó.
-Lo... Lo siento Loud. -decía colorada.
Me levanté y me alejé un poco para sacudirme el agua y un poco de barro, tras ello, sujeté mi pizarra y le contesté: "No pasa nada, ¿tú estás bien?"
Applejack, asintió un par de veces.
-Gracias... -dijo en voz baja, caminando a mi lado de nuevo.
Las chicas, no salían de su asombro, lo habían malinterpretado todo.
- ¿Lo habéis visto? Vaya con Loud, y parecía tonto. -decía Rainbow.
-Yo no he visto nada... -decía Fluttershy.
-Venga chicas, que los perdemos.
Finalmente, acabamos llegando al teatro, la cola era inmensa, se notaba que era una obra digna de mención, pero aún así, no tardamos en entrar, habíamos llegado justo a tiempo de que empezasen.
-Aquí no podemos hacer nada. -declaró Rarity.
- ¿Qué dices? Pagamos la entrada y listos. -decía Rainbow.
-Rainbow Dash, primero, las entradas para la ópera son muy caras, y segundo, es vulgar y grosero entrar una vez empieza la función. -le contestaba Rarity.
-A mi no me importa esperar. -decía Fluttershy.
- ¡Aahh...! ¡Está bien! Esperemos. -quejaba Rainbow.
Pasaron alrededor de dos horas y medias, y ellas esperaban fuera, Rainbow, ya había perdido casi toda la paciencia de la que era capaz de abastecerse. El sol, empezaba a ocultarse.
- ¡¿Pero cuánto tiempo dura la maldita obra!? -seguía quejando Rainbow Dash.
-Según el programa... Ya debe de estar a punto de acabarse. -le respondía Fluttershy.
-Ten un poco de paciencia, Dash. -le dijo Rarity.
De pronto, los Ponys empezaron a salir del teatro, esto, puso en alerta a las chicas, que se ocultaron en una esquina. Casi al final, Applejack y yo, salimos, Applejack, tenía cara de estar feliz, de haber disfrutado de aquello, y el día en general.
-Míralos, ahí están. -decía Rarity.
-Applejack parece muy contenta. -decía Fluttershy sonriendo.
-A saber lo que habrán hecho dentro. -decía Rainbow Dash.
-Loud, ¿qué toca ahora? -me preguntaba Applejack.
Miré el folleto, ahora, teníamos la cena en el restaurante Magical Hat, se lo señalé y emprendimos el camino, no, sin ser seguidos.
-Van a Magical Hat. -decía Rarity.
- ¿Y dónde es? -preguntó Fluttershy.
-Seguidme. -le respondió.
El restaurante, estaba a cinco manzanas de donde se encontraba el teatro, y era fácilmente localizable, el nombre, lo decía todo, Magical Hat, el cartel de la fachada, tenía un gran sombrero de pico expuesto, un sombrero, que a Applejack le resultaba muy familiar.
-Ese sombrero... ¿De qué me suena? -se decía Applejack a sí misma.
Entramos sin muchos problemas, el local, tenía un pequeño escenario, eso, me hizo deducir, que la cena tendría espectáculo. Inmediatamente, nos trajeron la cena, que era una pequeña pero surtida y variada selección de picoteo.
-Oh... Con el hambre que tengo y esto es lo que nos sirven. -decía Applejack.
Al verla, coloqué mi casco sobre el suyo, y usé mi pizarra para decirle: "no te preocupes, cuando salgamos, compraremos algo fuera". A lo cual, Applejack soltó una risilla bobalicona.
Mientras, en la otra esquina del restaurante Rainbow Dash estaba con el ojo avizor, volviendo a mal interpretar.
- ¡Le ha cogido del casco! -decía Rainbow agitando sus alas rápidamente.
-Puede que sólo quisiera llamarle la atención. -decía Fluttershy. -Recuerda que Loud es mudo.
-Eso no es excusa. -le contestó Rainbow.
-Rainbow Dash, dime, ¿no será que estas obsesionada con ellos porque a ti Loud te gusta? -le preguntó Rarity, tomando sorbos de su zumo de manzanas.
Ese comentario, tensó las alas de Dash al instante, dejándola colorada.
- ¡¿Pe-pe-pero qué dices?! -decía Rainbow. - ¡¿Cómo puede gustarme ese idiota?!
Rarity, junto a Fluttershy, rió levemente, enfurruñando a Rainbow. De pronto, las luces bajaron, y los focos apuntaron al escenario, donde el telón se fue levantando, bajo él, había una unicornio de azul claro, cubierta por un sombrero y capa moradas.
- ¡Saludos, público de Canterlot, os saluda la gran y poderosa Trixie! -decía aquella unicornio.
- ¡¿Trixie?! -decía asombradas Applejack a mi lado, y en el fondo Rainbow, Rarity y Fluttershy.
Miré a Applejack, preguntándome a qué venía su reacción, pero empecé a quitarle importancia, y a prestar atención al espectáculo con interés.
- ¡Admiraos ante los poderes de la gran y poderosa Trixie! -exclamaba eufórica.
Trixie, empezó la parafernalia, realizando trucos "asombrosos", aunque yo los observaba con interés, Applejack parecía algo molesta.
- ¿Cómo ha conseguido esa Pony un trabajo aquí? -decía en bajo.
La miré preocupado, así que usé mi pizarra para preguntarle: "¿Estás bien, Applejack?"
-Si, no te preocupes Loud. -me resopondió.
La tal Trixie, empezó a hacer un truco asombroso, pero en una de ellas, se tropezó, a punto de caer del escenario. Sorprendido, me acerqué corriendo todo lo que pude al escenario, al no llegar, usé mi magia para materializar una gran almohada, amortiguando su caída.
Cuando se repuso, me observó con los ojos muy abiertos.
-Eh... Esto...
La miré extrañado, en eso, Applejack se me acercó.
-Eres demasiado bueno, Loud. -me dijo. - ¿Estás bien, Trixie?
Trixie, se quedó algo muda.
-Eh... Si, la gran y poderosa Trixie está bien. -respondía. -Gracias, admirable fan.
Tras la cena, salimos del local, y no pude evitar ver a Applejack algo molesta, así pues, le pregunté: "¿Ocurre algo, Applejack?"
-No... Es sólo que... Verás, conozco un poco a Trixie, y las veces que la hemos encontrado, la ha liado bien. -me contestaba.
-Vaya, me silban los oídos. -respondía una voz familiar.
A pocos metros de nosotros, Trixie apareció acercándose a nosotros.
-Supongo que es inevitable, tengo tantos fans... -decía la fantasma de Trixie. -Te llamas Loud, ¿verdad? -me preguntó.
Asentí ligeramente. Trixie, se me acercó mirándome de reojo y esbozando una pequeña sonrisa.
-Interesante... grande, fuertillo, y una magia interesante, además, interesado en la gran y poderosa Trixie.
Yo alejé mi cara de ella, un poco nervioso, por otro lado, Applejack parecía más molesta.
-Dime... ¿Te gustaría venir conmigo en mi gira por toda Equestria? -me preguntaba Trixie, empezando a frotar su cuerno con el mío.
Al oír y ver aquello, a Applejack se le encogió el corazón del susto.
- ¡Alto ahí, preciosa! -decía Applejack intentando separarla de mí. - ¡Loud ya tiene un buen trabajo, y además, unas hermanas que cuidar!
-Bueno, seguro que yo también le puedo proporcionar un buen trabajo, ¿verdad? -dijo dirigiéndome la pregunta.
Applejack, empezó a gruñir entre dientes.
- ¡Qué te alejes de él!
Applejack, la alejó de mi, ambas, parecían que se iban a pelear, pero entonces, entre las dos se interpuso Rainbow Dash.
- ¡Quietas las dos! -decía.
- ¡¿Rainbow?! -decía sorprendida Applejack. - ¡¿Qué haces aquí?!
-Ya os contaré luego, pero alto las dos.
Rarity y Fluttershy, se pusieron a mis lados, jadeando al ver a Rainbow interponerse entre las dos, yo, impresionado, y a la vez un poco enfadado, usé mi pizarra para preguntarles: "¿Qué demonios hacéis vosotras aquí?"
-Eh... Esto... -titubeaba Fluttershy.
-Luego te contamos. -respondía Rarity.
Las tres, estaban envueltas en una discusión bastante fuerte.
-Aparta Rainbow, esta Pony se va a enterar de quien soy. -le advertía Applejack.
- ¿En serio crees poder darle una lección a la Gran y Poderosa Trixie? -decía chulona Trixie.
-Calmaos las dos. -decía Rainbow Dash.
Applejack y Trixie se iba a lanzar la una contra la otra, y con Rainbow en medio. Al ser testigo de aquello, mi cuerno se iluminó intensamente, y entre ellas, levanté sacos de plumas, para detenerlas. Las tres, se quedaron impresionadas, mirándome. Ante las tres, lancé una mirada de enfado, algo que no se esperaba ninguna, ni siquiera Fluttershy y Rarity.
- ¿Qué haces, Loud? -preguntó Rainbow.
Me senté en el suelo con firmeza, y comencé a mover mis cascos, hablándoles con el lenguaje de signos, como era de esperar, Rainbow no me entendía, y Trixie, no sabía el por qué.
- ¿Qué hace? -preguntó Trixie.
-Hablar, es que Loud Off, es mudo. -le respondió Rainbow.
- ¡¿En serio?!
-Applejack, ¿le entiendes? -le preguntó Dash.
-Algo, a ver... "¿Se puede saber que estáis haciendo? Ya sois mayorcitas como para estar peleándonos de esta forma". -traducía Applejack. -"Hemos venido a pasar un buen fin de semana, y ahora mismo, lo estáis estropeando"
Applejack, se sintió afligida por ello, al igual que Rainbow Dash.
-La gran y poderosa Trixie sólo te estaba invitando, sutilmente, a que le acompañarás por Equestria.
Empecé a mover los cascos en dirección hacia Trixie, mientras Applejack continuaba traduciéndome.
-"Y tú, no deberías molestar a los Ponys que intenta ser amables contigo, sólo hice lo que debía hacer, no buscaba nada, simplemente me recordaste a mis hermanas pequeñas, que se esfuerzan por hacer bien su magia".
Ante ello, Trixie bajó la cara avergonzada.
-"Ya os estáis disculpando vosotras dos, ahora mismo".
Tras terminar, golpeé el suelo con mis patas delanteras con fuerza, esperando que ambas se disculparan. Applejack y Trixie, se acercaron la una a la otra, cabizbaja, era increíble que tuviera que tratar a las dos como mis hermanas pequeñas.
-Yo... Eh... La gran y poderosa Trixie, te pide disculpas por las molestias ocasionadas. -decía avergonzada.
-Yo... Siento haberme comportado como una tonta. -le respondió Applejack.
-En fin... Me tengo que ir, seguro que mi público me espera.
Tras decir ello, se me acercó.
-Y en cuanto a ti, perdón por molestar y ser insistente. -me decía Trixie.
Usé el lenguaje de signos para decirle: "Perdonada", traducido gracias a Applejack. Tras ello, Trixie se marchó al restaurante. Tras ello, las chicas se me acercaron, pero mi mirada no mejoraba, aún estaba enfadado con todas. Así pues, les escribí: "¿Y vosotras, qué hacéis aquí?"
-Éste... -intentó decir Fluttershy.
-Es mi culpa. -continuó Rainbow Dash. -Me sentía celosa por no poder pasar un fin de semana como ése, y convencí a las dos para espiaros.
-Sabemos que nos hemos portado mal con esto. -continuaba Rarity.
Las miré durante un rato.
- ¿Po... Podrías perdonarnos, Loud? -preguntó Rainbow juntando a sus amigas.
Luego, miré a Applejack, buscando una buena respuesta, pero al final, las miré, alcé la cabeza, y mientras asentía, mi cara cambiaba a una alegre. Las tres, se alegraron, dándome las gracias, tras ello, me acerqué a Applejack, usando ésta vez la pizarra para decirle: "Siento que el primer día haya salido mal"
-No te preocupes. -me respondió.
Luego, me dirigí a las chicas, invitándolas a pasar la noche en nuestra habitación. Tras llegar al hotel, me fui a dormir al sofá, dejándoles las camas a las cuatro, las cuales, empezaron a hablar.
-Mira que seguirnos a escondidas... Sois unas curiosas. -les dijo Applejack.
-Lo sentimos, Applejack, yo también tenía un poco de celos. -le respondía Fluttershy. -Deseaba tanto ir a los jardines que me dejé llevar por ellas.
-Yo quería disfrutar de todo el lujo que ofrecían esas entradas, el SPA, el teatro..., simplemente, sublime. -continuaba Rarity.
-Pero Applejack, entre nosotras, ¿me vas a decir que no te ha gustado estar por ahí con Loud? -le preguntó Dash con mirada picarona.
Ante el comentario, Applejack le lanzó la almohada a la cara, y ambas estuvieron riendo hasta bien entrada la noche.
A la mañana siguiente, y tras disfrutar del SPA, nos dirigimos a los jardines de palacio, era un vergel hermoso e inmenso, lleno de árboles, plantas y muchos tipos de aves, algo que entusiasmaba a Fluttershy, quien se ponía a jugar con los animales.
-Veo que os estáis divirtiendo. -decía una voz elegante y regia.
Todos, nos giramos hacia donde procedía la voz, todos, pudimos ver a la princesa Celestia, con un porte elegante y segura.
-Es un placer géneros aquí a todas. -les decía Celestia a las chicas, las cuales se postraban.
Yo, sin embargo, estaba petrificado.
-Tú debes de ser Loud Off, ¿verdad?
Al verla dirigiéndose a mí, rápidamente, me postré ante ella, dejando la cara casi pegada al suelo.
-No te preocupes, pequeño Pony, no tienes por que hacerlo.
Me quedé sorprendido, alzándome despacio.
-Princesa, ¿cómo conoce a Loud? -le preguntó Applejack.
-Twilight me ha estado contando cosas acerca de él. -respondió. -Lo cierto, es que deseaba conocerle.
En eso, Celestia, fijó su mirada en mí, observándome de cerca, como ya hiciera antes Zecora.
-Eres tal y como me explicaba Twilight en sus cartas. -decía. -Único entre los Ponys, y entre tus amigos.
Ante ese comentario, sólo sonreí, ruborizándome. Tras un largo tiempo hablando con la princesa, acabamos por partir de nuevo, aunque todas las actividades del folleto habían terminado, yo quería hacer un poco más de turismo. La princesa nos despidió en las puertas del jardín, pero una vez nos fuimos, Celestia entró en el palacio.
-Hermana, ¿lo has visto? -le preguntaba Celestia a Luna.
-Así es, percibo algo en él. -le respondía Luna.
-Aunque no estemos unidas a los elementos de la armonía, aún siento vibrar en mí al árbol de la armonía, y me dice algo sobre ese joven potro. -le contaba Celestia a su hermana.
-Le he estado observando en sus sueños, no parece que la maldad le invada, al contrario, está lleno de bondad y sentimientos bondadosos, eso sí, una imaginación muy amplia. -le contestaba Luna.
-Sólo el tiempo nos lo dirá.