Uhm... Veréis, estoy en 3º de grado en la universidad, y en mi clase nadie quiere ser delegado.
En fin, el caso es que, ya que nadie más se presenta y necesitamos un delegado para representar la clase, y como soy de los que más tiempo libre tienen (no trabajo; vivo cerca del centro, al contrario del resto de la clase que deben venir en coche o transporte público...), pues he cogido el toro por los cuernos y he dicho que yo podría atreverme a presentarme, pero que me gustaría que se presentase alguien más.
Pero... ha sido mencionárselo y *cri cri cri cri cri*. Toda la clase sin decir nada y con cara de "¡Noo, a mí no me mires ".
Vamos, que ni ser sub-delegado quieren...
En fin, que si me presento mediante la aplicación virtual, quedo delegado definitivamente, sin un subdelegado que me respalde o que esté ahí si yo faltase un día.
Quería preguntar, ¿alguien ha sido delegado en universidad? ¿Vale la pena presentarme y comerme las posibles responsabilidades? ¿Tan terrible es para que nadie quiera? ¿Qué pasaría si en el último momento me echase atrás y dejase al grupo sin representación?
GRASIAS DE HANTEBRASO.